Una de cada cinco mujeres empleadas de 25 a 54 años con hijos a su cargo trabaja a tiempo parcial, porcentaje que, aunque ha mejorado tímidamente en los últimos años, dista todavía mucho de la proporción de hombres en esa misma situación: solo el 4,1% con un hijo ha reducido su jornada. Dicho de otra forma, las mujeres con hijos todavía trabajan seis veces más a tiempo parcial que los hombres.

Aun así, y pese al desequilibrio que persiste todavía entre hombres y mujeres en ese sentido, España refleja datos mejores que los de la media europea. Según la última actualización del INE sobre Conciliación, trabajo y familia, si en España la tasa de mujeres trabajadoras a tiempo parcial y con hijos rondó en 2021 el 25%, en la Unión Europea (UE) estuvo entre el 30 y el 40%, dependiendo del número de hijos. 

A cuantos más hijos, mayor es la parcialidad para ellas. Según las estadísticas, la diferencia entre tener un hijo a tener tres pasa de un 24,4% de temporalidad, al 25,5%. Más acusado es el caso europeo, que pasa del 28,7% al 39,8%. Es decir, casi cuatro de cada diez mujeres en Europa con tres hijos o más trabaja a tiempo parcial. 

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El peso de los cuidados sigue recayendo en ellas

Se aprecia igualmente cierta mejoría al analizar la evolución de los últimos años. En España, en 2018, el 31,4% de las mujeres con tres hijos o más tenían una jornada reducida (el 4% de hombres), lo que supone que de 2018 a 2021 se ha rebajado esa proporción en casi seis puntos. No obstante, esa bajada en ellas no va de la mano de una subida de iguales proporciones en el caso de los hombres, que pasaron de una temporalidad (con tres hijos) del 4% en 2018, al 5% en 2021. 

En general, la parcialidad de las mujeres es significativamente más alta que la de los hombres (22%, frente al 5,6%, en total), pero los datos revelan cómo el hecho de tener hijos a cargo dispara la reducción de jornada de las mujeres de 25 a 34 años. Por ejemplo, en un hogar compuesto por dos adultos con hijos, la parcialidad de las mujeres se eleva al 23,5%, mientras la de los hombres se reduce al 3,4%. 

La situación opuesta (un hogar de dos adultos sin hijos) reafirma esa hipótesis, pues la parcialidad de ellas desciende casi siete puntos, hasta el 16,8%. Más baja es la proporción si se tiene en cuenta la situación de un hogar en el que solo vive una mujer adulta, sin hijos: su parcialidad desciende al 13%. 

Más mujeres jóvenes a tiempo parcial para cuidar

Por cuidado de personas dependientes, el escenario es diferente. Hay, en general, algo más de equilibrio entre hombres y mujeres, pero depende en gran medida de la edad. Destaca, por ejemplo, el peso de los cuidados en mujeres jóvenes respecto a los hombres: el 16,6% de las mujeres que está a tiempo parcial por cuidados tiene entre 25 y 34 años (frente al 2,5% de los hombres). Además, tres de cada diez de ese 16% reconocen que se encargan ellas mismas de los cuidados porque no se pueden costear relegar esa tarea a terceras personas. 

A este respecto, la serie actualizada este lunes ofrece una aproximación a las razones por las cuales deciden reducirse la jornada y dedicar esa parte a los cuidados de personas dependientes. En el caso de los hombres, el 74,5% lo hizo por querer cuidar "personalmente" de hijos u otros familiares. 

En el caso de ellas, el porcentaje de mujeres que trabaja a tiempo parcial por querer dedicarse a los cuidados baja al 62,7% y un 29,3% lo hace por no poder costearse los servicios de cuidado o porque considera que no hay "servicios adecuados" para ello.