Cómo cuidar de las ninfas: forrajeo, luces nocturnas y un espacio amplio para su potente vuelo, las claves de su bienestar

Loros buscando comida en el suelo en el centro de Avetropic.
Ninfas buscando comida en el suelo en el centro de Avetropic.
AVETROPIC
Loros buscando comida en el suelo en el centro de Avetropic.

Las ninfas son una especie de ave psitácida de la familia de las cacatúas y es considerada una de las especies más comunes como mascota. Sin embargo, y en comparación con otras aves que solemos tener en el hogar, las ninfas tienen algunas peculiaridades en cuanto a sus cuidados que son importantes tener en cuenta para asegurarnos de ofrecerles la mejor calidad de vida. 

Hay tres aspectos que son clave para que esta especie viva sana y feliz: el forrajeo, su forma favorita de alimentarse; el espacio, que debe ser lo suficientemente amplio para facilitar su vuelo, más potente que el de otros loros de su tamaño; y la presencia de luz durante la noche, para evitar golpes cuando se asustan en la penumbra. 

Roger Valls, cofundador de la asociación Avetropic, cuya misión es salvaguardar el bienestar de las psitácidas (conocidas comúnmente como loros) que viven en condiciones de cautividad, así como contribuir a la conservación de aquellas que hacen lo propio en vida silvestre; explica en profundidad estos aspectos.

Preferencia por el forrajeo a la hora de alimentarse

Lo más característico de las ninfas en comparación con otros loros es su preferencia a la hora de alimentarse. "En estado silvestre, el 100 por cien de su dieta se compone de pequeñas semillas que se quedan adheridas a plantas o en el suelo, las cuales picotean", explica Valls. "El forrajeo es imprescindible para ellas por lo que, si les proporcionamos este tipo de actividad en un sustrato o superficie lo suelen disfrutar mucho".

"Una dieta prototipo para esta especie podría componerse de una base de producto elaborado y complementarla con una mezcla de semillas", añade el experto en aves psitácidas. "Las ninfas son animales muy granívoros, por lo que, partiendo de ahí, se les puedo luego dar un poco de fruta, hortalizas de hoja e incluso incluir legumbres, arroz y pasta cocidos o hidratados".

Por otro lado, otras de las particularidades que tienen las ninfas es que son animales de vuelo muy potente, a pesar de ser loritos pequeños. "Son animales que están diseñados para poder desplazarse largas distancias con poco esfuerzo", detalla Valls.

"Para desarrollar los comportamientos de vuelo, necesitan un espacio promedio mayor que el de otros loros de su tamaño. Hay que pensar que un animal salvaje va a estar muy restringido en cautividad por lo que, cuanto mayor sea el espacio que podemos ofrecerle, mayor será el beneficio para ellos, ya que le va a permitir realizar más actividades", afirma.

"Como aves de presa, las ninfas tienden a salir volando cuando se asustan y, en cautividad, esto puede derivar en choques"

Además, la capacidad que tienen de vuelo va ligado a otro aspecto muy importante que hay que tener en cuenta cuando se tienen ninfas en cautividad. "Son animales muy propensos a asustarse durante la noche y, cuando esto ocurre, su tendencia es salir volando, lo que, en plena oscuridad y en un espacio limitado, termina en choques sin control", lamenta el experto en psitácidas.

"Las ninfas son aves de presa, por lo que tienden a estar alerta. Sin embargo, mientras que otros loros se quedan quietos ante sombras, ruidos o movimientos desconocidos, las ninfas tienden a salir volando ya que, en libertad, su potente vuelo les facilita una vía de escape que, en cautividad se vuelve un problema", detalla.

Es por este motivo que Valls recomienda dejar una pequeña lucecita encendida durante la noche, para que si algo las asusta, al menos salgan volando y vean qué hay a su alrededor para no golpearse sin control y hacerse daño.

Otros cuidados básicos que conocer si tenemos ninfas

Igual que ocurre con la mayoría de aves psitácidas, las ninfas son animales muy inteligentes, activos y sociales, tres puntos muy importantes que deberemos tener en cuenta a la hora de cuidarlas. "Lo ideal es que vivan en grupo y con los de su especie, así garantizaremos su bienestar a largo plazo", explica Valls.

"Además, tal y como haríamos con otras especies, si podemos proporcionarles un entorno dinámico en el que su espacio y sus actividades sean diferentes, desarrollarán muchos comportamientos y estarán mentalmente sanos", añade.

Además,  en el caso de las ninfas, las hembras presentan muchas puestas crónicas o comportamientos reproductivos en exceso si no sabemos cómo lidiar con ello correctamente. "Es importante saber cuándo y cómo retirar los huevos para que no termine en un problema mental crónico y que desgaste al animal", concluye Valls.

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