España tendrá una antena diplomática en Chisinau, capital de Moldavia, país limítrofe con Ucrania y de gran vulnerabilidad. El país extiende así sus tentáculos diplomáticos cuando se cumplen ya 100 días de la guerra, que comenzó tras la invasión de Rusia el pasado 24 de febrero. Así lo ha anunciado este viernes el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, desde el país moldavo, donde ha sido recibido por la primera ministra, Maia Sandu.

“Quiero anunciar que vamos a abrir una oficina diplomática en Chisinau”, ha lanzado el presidente, cuya imagen estaba aderezada con tres banderas españolas y otras tantas moldavas. Según explica Moncloa, una antena diplomática suele ser el paso previo a la creación de una embajada -aunque no siempre tiene por qué-. Así, la figura no es la de un embajador, sino la de un consejero de un país limítrofe. En la actualidad, España cuenta con 'antenas diplomáticas' en países como Azerbaiyán o Georgia, donde las relaciones diplomáticas españolas están ganando cada vez mayor intensidad.

En este sentido, el mandatario español ha querido condenar la agresión “injusta e injustificada” de Vladimir Putin, un mensaje al que dan importancia al lanzarse en un país sobre el que la federación rusa ya ha puesto el foco. “Es un mensaje claro y rotundo”, ha señalado el propio Sánchez, que ha asegurado que España “está con Moldavia y defiende su soberanía y su integridad territorial”.

La visita de Sánchez a Moldavia estaba prevista para finales del mes de abril. Sin embargo, las escuchas con Pegasus a independentistas catalanes y las negociaciones para sacar adelante el primer plan de choque contra las consecuencias económicas de la guerra provocó que cancelara el viaje. No obstante, este viernes Sánchez sí se ha convertido en el primer dirigente español que pise suelo moldavo, justo cuando se cumplen tres décadas de las relaciones bilaterales entre ambos países y después de que ya hayan iniciado los trámites para solicitar la adhesión a la UE.

Cabe recordar que a Moldavia han entrado en los últimos 100 días algo más de 425.000 refugiados procedentes de Ucrania. Una situación que este país ha podido afrontar con ayudas internacionales, también de España. El presidente ha cifrado en 30 toneladas la ayuda recibida por el país desde España. Además, el Gobierno va a destinar ocho millones de euros para los países limítrofes con Ucrania y se ha ofrecido a acoger a 2.000 refugiados ucranianos que actualmente están en Moldavia.