Sanidad rechazó en junio la venta de los antígenos profesionales que ahora ha autorizado ante la escasez en farmacias

Colas en una farmacia de Madrid.
Colas en una farmacia de Madrid para conseguir tests de antígenos.
Jorge Paris
Colas en una farmacia de Madrid.

El Gobierno busca con urgencia proveedores de test de antígenos para abastecer a las farmacias y dar respuesta a una demanda multiplicada "por 1.000" en los últimos días, antes de Navidad. Para ello, ha autorizado que empresas que fabrican pruebas diagnósticas de uso profesional puedan suministrar a las boticas. Sin embargo, el Ministerio de Sanidad podría haber hecho antes este trámite que ahora reviste tanta urgencia, porque ya en junio así se lo pidieron las empresas que los fabrican. El departamento de Carolina Darias lo rechazó entonces al considerar que no era "necesario".

El rechazo a vender test de uso profesional –inicialmente destinados a hospitales o centros de salud– en farmacias consta en una respuesta del Gobierno que data del 17 de junio y que remitió en respuesta a la pregunta escrita que le formuló la diputada del PNV Josune Gorospe. Gorospe recordaba al Ejecutivo la petición que había elevado la Asociación Española de Bioempresas (Asebio) en un momento en el que el Gobierno preparaba la modificación legal para permitir la venta en farmacias de los test de antígenos sin que fuera necesario tener receta, como dictaba la ley hasta entonces, y Sanidad rechazó esa posibilidad.

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Peligro de desabastecimiento

Según explica el director general de Asebio, Ion Arocena, el pasado mes de mayo se pusieron en contacto con el Ministerio de Sanidad para "avisar del peligro de desabastecimiento", tal y como había ocurrido en otros momentos de la pandemia y de cara a futuros picos de demanda, como el actual. También para hacerle ver que en esos momentos los organismos notificados, encargados de estas autorizaciones, estaban saturados, tanto en España como en el resto de Europa, y que por eso era conveniente que la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS) expidiera las autorizaciones temporales e individuales pertinentes para asegurar el suministro en las farmacias autorizando, como finalmente se ha hecho ahora por la vía de urgencia, la venta en farmacias de test de antígenos fabricados para uso profesional.

 "Lo que lo que trasladamos [en mayo] es que, dado que hay un cuello de botella por falta capacidad de los organismos notificados era necesario establecer un proceso acelerado para que la AEMPS expidiera esas autorizaciones", explica Arocena. Había una segunda reclamación: que hubiera planificación por parte del Gobierno para dar "seguridad jurídica" a los productores de test, de modo que pudieran hacer las inversiones necesarias para adaptar test de uso profesional y convertirlos en pruebas de autodiagnóstico. "Si tienes que pasar de un formato de 25 test por caja a uno individual, tienes que comprar componentes", ejemplifica Arocena.

Sin embargo, en junio el Gobierno no vio la necesidad. "La AEMPS no ha aceptado las alegaciones y modificaciones propuestas" por la Asebio, informó el Ejecutivo a Gorospe en su respuesta escrita. Ahora, con el pico de demanda antes de Navidad, es cuando ha visto a urgencia de expedir las autorizaciones, en un giro donde el PNV denuncia falta de previsión.

Así lo explicó la ministra de Sanidad, Carolina Darias, en el Congreso el miércoles por la mañana y así lo comunicó después el presidente, Pedro Sánchez, en la Conferencia de Presidentes como una de las acciones para tratar de contener la sexta ola de cara a Navidad. La situación epidemiológica del pasado junio dista mucho de la actual, con una sexta ola a las puertas de Navidad que ya no se esperaba de no haber aparecido la variante ómicron.

El PNV, por su parte, llegó a reprochar este miércoles a Darias que no se hubiera comunicado con algunas empresas productoras de test de antígenos hasta apenas unos días antes, cuando supo que su grupo le iba a volver a preguntar por ello en el Congreso. La ministra lo negó. "No es verdad que actuemos cuando ustedes preguntan, nuestra preocupación es total", dijo.

"Aquello que pasó con la mascarilla no tenía que haber vuelto a pasar ahora", lamentó la diputada del PNV. "Tiene productores kilómetro cero para resolver esta situación, tiene que ponerse las pilas y lo que no puede ser es que con la que va a caer en las próximas semanas las farmacias tengan problemas" de abastecimiento, insistió.

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