El presidente de Estados Unidos (EE UU), Joe Biden, ha pedido a la EPA (Agencia de Protección Medioambiental, por sus siglas en inglés), que se investigue el papel que el cambio climático ha podido tener en los más de 30 tornados que golpearon la noche del pasado viernes en seis estados de EE UU, dejando decenas de muertos. 

"Todos sabemos que todo es más intenso con el cambio climático y obviamente... ha tenido un impacto aquí", dijo Biden durante una rueda de prensa.

Estas son las zonas afectadas por la ola de tornados que ha dejado más de 100 muertos en EE UU

Es durante los meses de abril, mayo y junio cuando los tornados recorren el medio este americano. Según datos de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) es extremadamente raro que estos fenómenos tengan lugar en el mes de diciembre. Tampoco son habituales las temperaturas alcanzadas este fin de semana en Kentucky, donde llegaron a los 25 grados centígrados.

Para Deanne Criswell, responsable de FEMA (la agencia federal de respuesta ante emergencias), los tornados que se han sucedido este fin de semana son "la nueva normalidad" a la que se enfrenta Estados Unidos. "Los efectos que estamos viendo del cambio climático son la crisis de nuestra generación", aseguró Criswell el pasado domingo en la cadena CNN.

Muchos meteorólogos también han apuntado al calentamiento global como posible causa de estos eventos inesperados, pero ¿son los tornados una rareza fruto del cambio climático?

Carlos Gámez

"Hay que ser precavido" y esperar a los estudios de atribución

"Esta ola de tornados ha sido un fenómeno tremendamente raro, extenso y violento", cuenta a 20minutos Francisco Martín, meteorólogo que trabajó durante 36 años en la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). 

Los tornados se forman cuando aire frío choca con aire cálido y húmedo y lo empuja hacia abajo, y, a medida que sube el aire caliente, crea una corriente ascendente y giratoria, según el Centro Nacional de Investigación Atmosférica. Y ahí está la clave, que haya aire cálido y húmedo a estas alturas del año en estados donde normalmente se registran temperaturas cercanas a los cero grados centígrados.

¿Podemos volver a vivir una situación como la que dejó Filomena?

"Noviembre y los primeros días de diciembre han sido especialmente cálidos en la zona este de Estados Unidos, además las aguas del golfo de México, que juegan un papel fundamental en la creación de tornados, también están por encima de sus valores normales", explica el experto.

Muchos meteorólogos estadounidenses han señalado a los efectos del cambio climático como los responsables de este inusual evento, pero según Martín: "Todo parece indicar que el calentamiento global antropogénico (el generado por el hombre) y el efecto invernadero están detrás de esta ola de tornados, pero es algo que de ninguna manera se puede afirmar. Hay que ser precavido y hay que esperar a los estudios de atribución (aquellos que miden cuánto de probable es un fenómeno con la presencia del calentamiento global)".

Con él coincide el portavoz de la Aemet, Rubén del Pozo: "Hay que ser cauteloso y esperar a los estudios científicos. No se puede hacer generalizaciones así de fenómenos ambientales concretos".

"Puede que esto sea parte del propio clima de los EE UU y haya un periodo de retorno (la frecuencia con la que se repite un evento) como ocurrió con Filomena en España. Por eso se necesitan estudios científicos", señala Martín.

Aunque el Servicio Meteorológico Nacional (NWS) dio los avisos oportunos sobre la potencial peligrosidad de los tornados a las autoridades, cientos de viviendas e instalaciones han quedado arrasadas. Y, a pesar de que todavía no haya un recuento oficial, ya hay más de cien víctimas mortales. El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, describió la tormenta como "el peor, más devastador y mortal evento en la historia de Kentucky".