Dentro de diez años, la mitad de los profesores permanentes que trabajan actualmente en las universidades españolas se habrá jubilado. El envejecimiento de las plantillas es uno de los asuntos que el Ministerio de Universidades espera atajar con la ampliación de la tasa de reposición que contempla el proyecto del Gobierno y a la que se refirió el ministro Manuel Castells en la presentación de las cuentas en el Congreso. El objetivo es ampliar el número de docentes y hacer frente a su envejecimiento.

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A este mismo fenómeno hace referencia el anteproyecto de Ley Orgánica del sistema universitario (LOSU), donde se señala que la plantilla funcionarial está "notablemente envejecida", con una media de 49 años de edad. Por ello, el plan ahora es contratar a 12 nuevos profesionales por cada 10 que se jubilen. O, lo que es lo mismo, incrementar la tasa de reposición del 110 actual al 120%.

Según calcula Universidades, el número de profesores permanentes (funcionarios y contratados) que alcanzará la edad de jubilación en el curso 2030-31 será de un total de 27.871, un 53,5% del profesorado permanente actual. Partiendo de esos datos y aplicando la nueva estrategia de reposición, de aquí a 10 años se habrán añadido aproximadamente 5.570 nuevos profesores a la plantilla actualmente existente.

El objetivo base a partir del cual se ha establecido esta medida -y otras relativas a la temporalidad y a la financiación- es paliar con el impacto económico y presupuestario de la crisis económica de 2008. "Los efectos más directos fueron una reducción drástica de las tasas de reposición del profesorado, que ha provocado un envejecimiento importante de las plantillas y ha dificultado la entrada a la carrera académica de profesorado más joven", señala la norma en la exposición de motivos.

En el curso 2019-20, había un total de 127.383 profesionales empleados en las plantillas de personal docente e investigador (PDI). Entre los funcionarios- que representan un 84,3%- prácticamente tres de cada diez está en proceso de jubilación, esto es, con edades de 60 años o más.

Catedráticos y profesores titulares, los ámbitos más envejecidos

Especialmente envejecidas están las plantillas de catedráticos y profesores titulares. Casi la mitad de los catedráticos de universidad están en proceso de jubilación (48,84%); mientras que en el caso de los profesores titulares, el porcentaje es del 22%. Con todo, pese a que los titulares presentan una tasa de envejecimiento menor a la de los catedráticos, el 50% de los docentes tiene ya entre 50 y 60 años.

En la plantilla de catedráticos también interviene otra de las medidas que pretende aplicar el Gobierno con la nueva ley, que es la falta de representación femenina, especialmente en los altos cargos: el 75,13% de catedráticos son hombres, y únicamente el 24,87% son mujeres.

Estos cambios, destaca el departamento de Castells en el documento, deberían garantizar al personal docente e investigador la posibilidad de un avance en su carrera profesional, "facilitando especialmente a aquel profesorado más joven, que lleva años realizando una docencia, investigación y/o transferencia del conocimiento de calidad, el acceso a nuevas plazas que les proporcionen estabilidad".