El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, defendió este lunes la "unidad institucional" y aseguró que echa "de menos" poder "llegar a acuerdos con el PP". El también líder del PSOE celebró que la semana pasada socialistas y populares pudieran pactar la renovación de cuatro órganos constitucionales que tenían su mandado caducado, y agregó que también le "gustaría" extender ese desbloqueo al Consejo General del Poder Judicial, que tras el acuerdo para el Tribunal Constitucional, el Tribunal de Cuentas, el Defensor del Pueblo y la Agencia Española de Protección de Datos es, a juicio de Sánchez, aun "más inexplicable".

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En una entrevista en la Cadena SER, Sánchez citó al expresidente Felipe González para alertar de que "los cimientos" de la democracia "se pueden ir socavando si no se cumple con la Constitución", y reclamó al PP que "cumpla todos los artículos", que no "haga una lectura parcial e interesada" de la Carta Magna y que se avenga a desbloquear el órgano de gobierno de los jueces. En ese sentido, y preguntado por la posibilidad de reformar el sistema de elección de los vocales, como exigen los populares y recomienda la UE, Sánchez tildó esa condición de "excusa" y recordó que el PP ha llevado la propuesta dos veces al Congreso, quedando en minoría en ambas.

El presidente concedió la entrevista justo después del 40º Congreso Federal del PSOE, celebrado este fin de semana y en el que se aprobó una nueva Ejecutiva. En la renovada cúpula entran seis ministros, entre ellos Félix Bolaños, nombrado secretario de Reforma Constitucional y Nuevos Derechos. Y Sánchez confirmó este lunes que le "gustaría" reformar la Constitución para fortalecer valores como la igualdad entre hombres y mujeres, la sostenibilidad ambiental y perfeccionar el estado autonómico, para lo que se propone "hacer un ejercicio de pedagogía y persuasión política". "Porque para eso [para la reforma] necesitamos al PP", explicó. En el cónclave socialista, tanto Bolaños como Zapatero defendieron también los pactos con los populares.

Sánchez también se refirió a la salida de la Ejecutiva de Carmen Calvo, que deja la secretaría de Igualdad en manos de la joven diputada leonesa Andrea Fernández. El presidente expresó su "gratitud" a todos sus ministros y colaboradores y justificó la salida de la exvicepresidenta primera por el "nivel de exigencia" que impuso a su anterior equipo la crisis del coronavirus, así como por la necesidad de "nuevos equipos y renovación generacional" en esta "etapa de recuperación" tras el tiempo de "resistencia" ante el virus.

La unión del espacio progresista

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En clave electoral, el líder socialista se refirió a Yolanda Díaz y al espacio que aspira a liderar. Sánchez dijo que la titular de Trabajo es "una muy buena ministra" y, aunque quiso dejar claro que es "extremadamente respetuoso con Unidas Podemos", sí consideró "importante" que se dé un "proceso de unión a la izquierda del PSOE, porque el sistema [electoral] penaliza la división". "Necesitamos a todo el espacio progresista en plena forma", remachó.

Con esos aliados progresistas como base fundamental, Sánchez aspira a sacar adelante medidas como la derogación de la reforma laboral del PP, de la que dijo que no ha resuelto los problemas del mercado laboral; la derogación de la 'ley mordaza', que apuntó como una "tarea pendiente", y la abolición de la prostitución, para lo que consideró que hay una "amplia mayoría parlamentaria" favorable a la medida y para lo que también confió en el apoyo de la ministra de Igualdad, Irene Montero: "La ministra y yo hemos hablado, y creo que ella también tiene alta sensibilidad y empatía hacia esta causa, como no puede ser de otra forma".

Entre los socios del Gobierno también figura ERC, que será determinante para la aprobación de los presupuestos que garantizan la continuidad de la legislatura y que por ahora insiste en que está en el no. Sánchez dijo que los republicanos le están pidiendo "políticas progresistas e inversiones" y que seguirá negociando con ellos y con el PNV, entre otros socios. En todo caso, se esforzó en subrayar que las conversaciones sobre las cuentas están "desligadas" del debate territorial, que se aborda en la mesa de diálogo entre Moncloa y la Generalitat.

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Preguntado por la escalada imparable del precio de la energía en el mercado mayorista –y también, aunque en menor medida, del recibo de la luz, que se ha encarecido un 44% en el último años–, Sánchez admitió que es uno de los temas más "preocupantes" y defendió que ya ha adoptado medidas, al tiempo que prometió seguir insistiendo en "abrir el debate" en las instituciones europeas para que se tomen decisiones que favorezcan la contención de la factura a nivel comunitario.

Finalmente, y sobre el rey emérito, el presidente opinó –como ya hiciera la semana pasada-, en que debería dar "explicaciones" sobre las investigaciones que le afectan y sobre las "razones que le han llevado a ausentarse de España", admitió su "tristeza por este debate" y defendió que el actual jefe del Estado está "comprometido con la transparencia". En esa línea, reiteró el "compromiso" del PSOE con la monarquía constitucional y descartó apoyar una comisión de investigación parlamentaria -que repetidamente han planteado UP y y formaciones nacionalistas e independentistas– con el argumento de que "se plantea en "términos de república o monarquía". Sí se mostró en cambio favorable a una reforma que acabe con la inviolabilidad del monarca: "Creo que no es necesario que se le reconozca esa condición", comentó.

Casado insta a Sánchez a romper con Podemos

Por su parte, el presidente del PP y líder de la oposición, Pablo Casado, replicó que Sánchez no es "ni moderado ni socialdemócrata" y le advirtió de que, si quiere girar hacia la moderación, tiene que romper antes con sus socios de Gobierno, Unidas Podemos, los independentistas y Bildu. En una entrevista en Onda Cero, Casado consideró que si la agenda del presidente pasa por derogar la reforma laboral y la 'ley mordaza', lo mejor es que "deje paso a otros partidos", y rechazó reformar la Constitución con el argumento de que "las reformas se tienen que hacer cuando hay mimbres para hacer un mejor texto", informa EFE.

"Yo creo que, con la que está cayendo en Cataluña, como abramos el texto constitucional, que es la solución a la unidad nacional y a la igualdad de los españoles, estaremos cometiendo un error", insistió el líder popular, quien acusó a Sánchez de plantear una reforma de la Carta Magna "para dar encaje a sus socios independentistas".