Las personas que hayan pasado por un trasplante o que se encuentren en tratamiento contra el cáncer recibirán una "dosis adicional" de la vacuna contra la Covid, pero puede que no sean los únicos. Las personas más mayores se perfilan como otro colectivo que también podría ver reforzada su protección contra el virus por medio de un tercer pinchazo, siempre que así lo aconseje la evidencia científica que el Ministerio de Sanidad y los expertos esperan obtener de estudios en marcha o a punto de empezar, como uno que conducirá el Instituto de Salud Carlos III sobre la inmunidad de personas que viven en residencias de ancianos.

De momento, los expertos del vacunas del Ministerio -la Ponencia de Vacunas- han recomendado empezar con personas inmunodeprimidas debido a un trasplante o al cáncer, unas discusiones en las que nunca ha estado sobre la mesa poner dosis de refuerzo por edad, por ejemplo, a la población mayor de 65 años, como va a hacer Francia, a la espera de que exista evidencia científica que así lo aconseje. 

Precisamente, el Centro Europeo de Prevención de Enfermedades (ECDC) difundió este miércoles un comunicado que no ve "necesidad urgente" de administrar dosis de refuerzo de vacunas "a individuos completamente vacunados en la población general", pero sí abrió la puerta a personas inmunodeprimidas sobre las que ya hay consenso en España y también a "personas mayores y más frágiles" como "medida de precaución". El organismo europeo se refiere en concreto a personas que viven "en entornos cerrados", como residencias de ancianos en las que va centrarse la investigación del Instituto Carlos III.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, insistió en seguir las indicaciones del ECDC y de la EMA "y si van surgiendo otras propuestas [distintas a las dirigidas a trasplantados y enfermos de cáncer], estaremos atentos". 

Sanidad planea ya la dosis de refuerzo: trasplantados y enfermos de cáncer, con la misma vacuna y no será inmediato

Una vez cerrado el capítulo de trasplantados y personas en tratamiento oncológico, Sanidad se mantiene en contacto con diversas sociedades científicas para explorar otros colectivos que podían recibir un nuevo pinchazo, con el fin de igualar su respuestas inmune a la de personas con un sistema inmunológico "robusto".

"En el resto de grupos falta algo de evidencia científica, un conocimiento más exhaustivo sobre la viabilidad" de una tercera dosis, afirmaba un experto de Sanidad un día antes de que este miércoles empezara el procedimiento para vacunar de nuevo a trasplantados y enfermos de cáncer. Sin embargo, no se cierra la puerta a vacunar a las personas más mayores, aunque "lo prudente y lo razonable es esperar por lo menos a que los órganos reguladores se pronuncien", en referencia a la Agencia Europea del Medicamento (EMA) de quien el Gobierno espera alguna recomendación una vez que las farmacéuticas concluyan sus ensayos clínicos sobre la dosis de refuerzo. 

Para ello será necesario tener certezas de la duración de la inmunidad que confieren las vacunas, que previsiblemente disminuye a más velocidad en las personas de más edad debido al "desgaste" de su sistema inmunológico, apunta el portavoz de la Sociedad Española de Geriatría, José Gutiérrez.

En términos generales, indica que lo que se está viendo es que el nivel de anticuerpos en sangre empieza a disminuir a partir del cuarto o sexto mes después de la vacunación en la población en general, algo que es más acusado en la población más mayor, con un "sistema inmune envejecido". 

Sin embargo, Gutiérrez recuerda que "el sistema inmunitario es mucho más complejo" y que, además de los anticuerpos en sangre, está formado también por la inmunidad celular que "nos siguen protegiendo del coronavirus". En este escenario, añade que todavía "no está claro" si es necesaria una tercera dosis de vacuna pero también que "sospechamos" que en las personas más mayores sí podría haber una "disminución de eficacia". "De confirmarse, estaría indicada la tercera dosis", añade.

Como la gripe estacional

En este caso, no se trataría del colectivo de mayores de 65 años, a partir de los que tradicionalmente empezaba la tercera edad, sino a personas que son realmente mayores y Gutiérrez apunta a los mayores de 80 años. Sería, dice, como la gripe estacional. "No descarto que esa tercera dosis sea necesaria para gente mayor y puede ocurrir con el coronavirus lo mismo que con la gripe, que anualmente determinado grupo de riesgo precise una vacunación igual que contra la gripe", señala.

Ya el martes, Darias incidió en el Congreso en la necesidad de tener evidencia científica para abordar la inoculación de dosis de refuerzo. "Debemos conocer bien cómo funciona la inmunidad, tanto por infección natural como por la vacunación, es clave en la toma de decisiones sobre la necesidad de aplicar refuerzos", dijo en la comisión parlamentaria de Sanidad.

Estudio del Carlos III

Una de las investigaciones que podría arrojar luz sobre esta cuestión es la que lanzará este mes de septiembre el Instituto de Salud Carlos III para conocer la evolución de la inmunidad tras ser vacunadas de personas que viven en residencias de mayores.

Según apuntan en esta institución asesora del Ministerio, no es un estudio que busque específicamente dar una respuesta a si es necesario inocular una dosis de refuerzo a la población más mayor, pero sí puede arrojar información valiosa para ello. También puede hacerlo el otro estudio que iniciará el Carlos III, en este caso sobre el Covid persistente.

De momento, todavía se está organizando la metodología de cómo se medirá la evolución de la inmunidad de los residentes, que constará previsiblemente de dos puntos temporales, para poder compararlos. Después deberá hacerse el reclutamiento de voluntarios y el Instituto Carlos III espera poder tener resultados a finales de este año.