Los Mossos d'Esquadra prosiguen, de momento sin éxito, la búsqueda del padre del niño de dos años de edad asesinado la noche del pasado martes en un hotel de Barcelona, Martín Ezequiel Álvarez Giaccio, por su presunta relación con la muerte del menor.

Los especialistas de la policía autonómica en la búsqueda de reclusos huidos o que no regresan de permisos se han unido al grupo de homicidios que investiga el caso para tratar de localizar posibles paraderos del fugitivo.

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De momento, están revisando todas las cámaras de seguridad de los lugares por donde habría pasado para tratar de recomponer su trayectoria, mientras analizan llamadas de algunos ciudadanos que creen haberle visto en diferentes lugares de Cataluña, de momento sin resultado positivo. "La participación ciudadana está siendo ejemplar", aseguran fuentes de los Mossos a 20minutos.

Los Mossos d'Esquadra siguen pidiendo la colaboración ciudadana para localizar al presunto asesino y han difundido su fotografía.

Mientras la policía autonómica custodia el domicilio de la esposa del presunto asesino, hasta ahora el supuesto parricida no se ha puesto en contacto con ninguno de los familiares que tiene en España, como su padre, que lleva años viviendo en El Vendrell (Tarragona) y que, como el resto de la familia, desde el primer momento se puso al servicio de los investigadores.

Creen que no ha podido abandonar el país

El hombre, economista, nacido en Argentina y nacionalizado español, de 44 años de edad, que mide 1,78 centímetros de altura y con el pelo rapado y la barba recortada, podría haber huido del hotel en taxi y habría llegado hasta el aeropuerto, aunque los investigadores, que están revisando las cámaras de seguridad del recinto aeroportuario, creen que no ha podido abandonar el país con su pasaporte.

Según informaciones publicadas el pasado sábado, el fugitivo podría haber huido del hotel en taxi y habría llegado hasta el aeropuerto. Los investigadores interrogaron a un taxista que aseguró haber llevado al sospechoso hasta la terminal 1 del aeropuerto de Barcelona.

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Martín Ezequiel Álvarez Giaccio iba vestido, según el taxista, igual como lo captaron las imágenes de seguridad del hotel y no llevaba nada encima, ni una mochila, ni una bolsa.

Los investigadores trabajan ahora con las imágenes de las cámaras de seguridad del aeropuerto, aunque, por el momento, no habían conseguido seguirle el rastro en el interior de la terminal.

En el aeropuerto de Barcelona hay centenares de cámaras de seguridad que vigilan la zona, aunque existen espacios negros sin control. Por otra parte, el hecho de ser obligatorio llevar mascarilla dificulta las tareas de visionado e identificación de cualquier sospechoso en las imágenes de las cámaras.