Iglesias, Gabilondo o Aguado... las 'víctimas' políticas que el 'ciclón' Ayuso ha dejado en el camino

Ayuso contesta a Abascal que "a defensa de la libertad" poco se le puede enseñar tras críticas por el certificado Covid
Ayuso contesta a Abascal que "a defensa de la libertad" poco se le puede enseñar tras críticas por el certificado Covid
ALBERTO ORTEGA
Ayuso contesta a Abascal que "a defensa de la libertad" poco se le puede enseñar tras críticas por el certificado Covid

La arrolladora victoria en las elecciones del 4 de mayo de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, cambió el curso de la política madrileña. El tsunami de votos logrado le permitió consolidar su poder en la Puerta del Sol y poner en marcha un gobierno en solitario.

Sin embargo, esto no solo iba a quedar ahí. Ese martes de mayo también fue la fecha en la que se puso punto final a la carrera política de varios de sus adversarios políticos. Dirigentes de Unidas Podemos, PSOE y Ciudadanos que, de una forma u otra, tuvieron que apartarse de la primera línea política tras su derrota frente a Ayuso.

Pablo Iglesias

El exlíder de Podemos y ex número tres del Gobierno del presidente, Pedro Sánchez, fue el gran perdedor de aquella contienda electoral. Pablo Iglesias tomó la decisión de dejar su puesto de vicepresidente, y bajar a la política regional, para intentar rescatar a la formación morada del naufragio en las urnas que las encuestas vaticinaban.

Durante su campaña electoral, el exvicepresidente tomó como su principal rival a Ayuso con ataques diarios. Aseguró que "es más de ultraderecha que la ultraderecha". Incluso, Iglesias no dudó en augurar que el futuro de la presidenta madrileña pasa por la cárcel: "Es más que probable que sea imputada y acabe en prisión".

También aseguró que la líder regional "desprecia la ley, desprecia el orden, desprecia que las normas de las que nos dotamos están para cumplirse". Iglesias prometió, fuera cual fuera el resultado en los comicios, se quedaría en la oposición. Sin embargo, terminó renunciando a todos sus cargos en esa misma noche electoral.

Ángel Gabilondo

Por su parte, el candidato socialista a las elecciones de mayo cosechó una derrota sin precedentes. No sólo obtuvo el peor resultado histórico del PSOE en unas elecciones al Parlamento de Madrid, sino que, por primera vez, convirtió a esta formación en la tercera, por detrás de Más Madrid. Y todo esto a pesar de que hace cuatro años ganó en las urnas a Ayuso aunque la suma de votos le privó de conformar un gobierno con Podemos y Más Madrid.

Con un tono algo menos agresivo que Iglesias, Gabilondo hizo campaña con diversos ataques que se salían de su línea marcada durante su desempeño como oposición. Acusó a Ayuso de blanquear a Vox, de incentivar el "efecto llamada del turismo de borrachera" y de apropiarse de conceptos como la libertad.

Gabilondo, hasta ese momento respaldado por Sánchez, tras la debacle en las urnas, no tuvo más remedio que apartarse y dejar su puesto a su número 2 en las elecciones, Hana Jalloul.

Ignacio Aguado

Su vicepresidente durante dos años de gobierno, fue una persona con la que Ayuso no terminó de entenderse. No había "feeling" personal entre ellos. Circunstancia, que unida a una serie de discrepancias entre ellos durante varios meses, especialmente en lo relacionado a la gestión de la crisis sanitaria, y a la moción de censura presentada por Ciudadanos en Murcia, que fue el detonante para que Ayuso convocara elecciones anticipadas.

Tras concretarse la ruptura, acusó a la 'popular' de haber "perdido la cabeza" y de "mentir" a los madrileños. Sin embargo, el movimiento de Ayuso supuso un jaque mate a la vida política de Aguado. No fue el candidato de Cs en el 4-M y a los días dejó la formación naranja.

Ángel Garrido

Este movimiento político de Ayuso, que dejó fuera a Aguado, provocó un efecto dominó donde también se llevó por delante a Ángel Garrido, el que fuera presidente de Madrid por el PP tras la dimisión de Cristina Cifuentes se apartaba de la primera línea tras la renuncia de Aguado, su principal valedor en Ciudadanos.

Entre las razones de su abandono, Garrido explicaba en un comunicado que "la política ha cambiado" y que ahora mismo se da en España una "política de bloques, radicalismo y, en buena medida, crispación", lo que para una persona de centro como él se define es "el peor escenario que se pueda plantear".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento