Los recursos contra los indultos a los líderes del procés no se han hecho esperar en el Tribunal Supremo. Ciudadanos y Vox han acudido esta mañana para recurrir contra la medida de gracias aprobada por el Gobierno el pasado martes. Cada partido lo ha hecho con una estrategia diferente, uno como acusación popular y otro como perjudicado para intentar superar el escollo de la legitimación y evitar que el alto tribunal desestime el recurso.
En el caso de Ciudadanos, a diferencia del PP y Vox, la formación naranja no es quien alega la legitimación, sino que el recurso lo han presentado Inés Arrimadas, José María Espejo y Carlos Carrizosa a título personal como tres diputados que estuvieron en el Parlament presentes en los hechos de 2017.
Según ha argumentado Arrimadas a las puertas del Supremo, acompañada del portavoz parlamentario, Edmundo Bal, los días 6 y 7 de septiembre de 2017 vieron "violados" sus derechos cuando se aprobaron las denominadas leyes de referéndum de autodeterminación y de transitoriedad jurídica, conocidas como "leyes de desconexión".
La formación confía en que quede acreditada su legitimación en la causa ya que los tres diputados solicitaron en su día amparo al Tribunal Constitucional, que les dio la razón. "Por lo tanto, tienen legitimidad, sin duda, desde el momento en que la sedición fue posible gracias al atropello de sus derechos fundamentales como representantes de los ciudadanos en el Parlament de Cataluña", señala el partido.
Y es que la sentencia del Tribunal Supremo, como ha recordado Edmundo Bal, abogado del Estado, señala que la sedición no habría sido posible sin las leyes aprobadas en el Parlamento.
En su escrito, los diputados solicitan además que se suspenda de forma inmediata la ejecución de los indultos al considerar que existe "un peligro para el interés general si los condenados y ahora indultados y en libertad reinciden".
Vox ha presentado su recurso como acusación popular
El partido de Santiago Abascal ha presentado su recurso poco después de Ciudadanos, a las 13.00 horas, rodeado por decenas de personas que han acudido a arroparles. En el caso de Vox, se personó como acusación popular en la causa del procés, por lo que consideran estar legitimados para recurrir los indultos, aunque existe cierto debate al respecto. Según ha explicado Bal, pese a que Vox fue acusación, "no es parte ofendida del delito" y, en cambio, sí lo son Arrimadas, Carrizosa y Espejo.
Abascal, por su parte, ha recordado que su partido ya acudió a los tribunales en 2017 "para defender la legalidad y consiguió sentar en el banquillo a los golpistas". También acudió en 2014 para denunciar la "dejación de funciones" del entonces presidente, Mariano Rajoy, ante los que intentaban cometer un delito de sedición.
A juicio del líder de Vox, Pedro Sánchez ha cometido un acto de "traición" y de "corrupción" por mentir a los españoles cuando en campaña prometía endurecer estos delitos y que se cumplieran las penas íntegras y ha hecho lo contrario. "Lo que ha hecho es un espaldarazo a los separatistas", ha indicado Abascal.
Acompañado por la dirección de su partido, ha reiterado la necesidad de este recurso, aunque no ha entrado en detalles técnicos ni sobre su legitimación para presentarlo, sino que ha reiterado que "el conjunto de los españoles asistieron al mayor acto de corrupción perpetrado por representantes públicos en nuestra democracia" y eso es lo que va a defender Vox.
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