El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, se reúne este jueves con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la Moncloa. Se trata del primer encuentro bilateral entre ambos, pese a que el popular tomó las riendas del Ejecutivo andaluz en enero de 2019, hace ya dos años y medio. La pandemia primero y la agenda de Sánchez después han ido aplazando una cita que Moreno ha reclamado con insistencia y a la que acude con al menos dos elementos claramente subrayados en su agenda: el primero, que se aclare el reparto de los fondos europeos; y el segundo, que el Gobierno no "orille" a Andalucía. 

Sobre la primera de las cuestiones, Moreno dijo este martes que es "un grave error" que las regiones "no conozcan" aún "la letra pequeña" de cómo se distribuirán esos fondos y defendió que, a nivel estatal, deberían tenerse en cuenta criterios similares a los que la UE ha empleado para repartir los recursos entre los veintisiete: la población, el PIB y la tasa de desempleo, tres criterios que a priori podrían favorecer a Andalucía, que es la autonomía más poblaba y que está en el vagón de cola en los otros dos indicadores.

En ese sentido, manifestó que espera que Andalucía cuente con "fondos suficientes", porque si la comunidad no sale "bien" de esta crisis, "España tampoco lo hará". "El Gobierno debe pensar necesariamente en Andalucía para salir de esta crisis porque todo lo que sea orillar a Andalucía será llevar al país a un crecimiento más lento y más lastrado (...). Caminando juntos, avanzaremos más", dijo el presidente andaluz en un foro organizado por el diario 'El Español'.

Además de aclarar los criterios, Moreno quiere conocer de boca del presidente del Gobierno qué tipo de proyectos se primarán y con qué mecanismos de gobernanza se van a gestionar los fondos, un asunto en el que el PP ha puesto reiteradamente el foco también a nivel estatal, llegando a reclamar la creación de una agencia independiente para su manejo y su supervisión, una vía que rechazó el Ejecutivo de Sánchez en el Congreso de los Diputados.

En esa conversación, el presidente andaluz también defenderá ante Sánchez, previsiblemente, la hoja de ruta que ha seguido desde que asumió las riendas de la Junta, basada, a su juicio, en la dinamización de la economía gracias a una bajada de impuestos, la reducción de las trabas administrativas para facilitar el emprendimiento y la generación de estabilidad reduciendo el déficit. En este sentido, el Gobierno de Moreno destaca que es una de las cuatro únicas comunidades donde no se ha elevado la deuda en el primer trimestre de 2021.

Con todo, Moreno aspira a que Andalucía tenga un papel "protagonista" en el nuevo tiempo que se abre tras la crisis del coronavirus, y quiere evitar que se "orille" a la comunidad. De hecho, el presidente de la Junta llegó a decir que si Sánchez "cede" ante Cataluña y se celebra la mesa bilateral Gobierno-Generalitat –un foro de negociación que el presidente del Gobierno pactó con ERC para su investidura–, también solicitará una mesa bilateral con Andalucía para abordar asuntos de interés general "y no de deslealtad con el marco constitucional".

Desde la Junta aseguran que se acude al encuentro con voluntad constructiva y actitud de "lealtad", pero insisten en que no consentirán que Andalucía sea "menos que nadie" ni que el encuentro se salde con una "simple foto". En ese sentido, Moreno quiere abordar cuestiones clave como la reforma de la financiación autonómica, el apoyo al sector turístico, la cuestión migratoria y una posible reforma de la Ley de Salud Pública de 1986.

Para preparar el encuentro, el presidente de la Junta mantuvo esta semana encuentros con los portavoces de los distintos grupos parlamentarios para debatir sobre estos asuntos y llevar a la Moncloa "las demandas de los 8,5 millones de andaluces", de forma "plural y diversa". Moreno se reunió con José Fiscal (PSOE), José Antonio Nieto (PP), Sergio Romero (Ciudadanos), Manuel Gavira (Vox) e Inmaculada Nieto (Adelante Andalucía).

Fuentes del Gobierno central sostienen, por su parte, que esta reunión forma parte de la "normalidad" en las relaciones con las comunidades, ya que el presidente tiene la intención de mantener encuentros con todos los jefes de ejecutivos autonómicos y que si no ha sido posible antes, se ha debido a los procesos electorales que han acontecido o a la situación generada por la pandemia del coronavirus.