La pandemia del coronavirus y, sobre todo, el confinamiento severo decretado al inicio de la crisis sanitaria, han puesto de relevancia, más si cabe, la importancia de la compañía, humana o animal. No en vano, Andalucía superó el pasado año por primera vez los dos millones y medio de animales de compañía registrados, alcanzando en concreto la cifra de 2.567.119, lo que supuso un incremento del 6,9% respecto al ejercicio anterior, según los últimos datos del Registro Central de Animales de Compañía de la Junta. Este crecimiento es el mayor contabilizado desde el año 2016, cuando la cifra de mascotas cayó más de un 10%. En los años posteriores, la tendencia ha sido al alza, pero con incrementos en 2017, 2018 y 2019 del 5,9%, 4,9% y 3,9%, respectivamente.

Del total de animales de compañía que hay registrados en Andalucía, la mayor parte son perros –más de 2,3 millones, el 91% del total–, con un crecimiento del 6,2% respecto a 2019. De estos, 67.152 (2,6%) son canes de razas consideradas como potencialmente peligrosas, un 7,5% más que el año anterior. A mucha distancia se sitúan los gatos, con 213.057 contabilizados en Andalucía, si bien son este tipo de animales de compañía los que más aumentaron el año pasado, con un incremento del 15,2%. Por último, se sitúan los hurones (10.885) y otras especies (5.470).

Por provincias, Málaga es la que más mascotas tiene registradas, con 558.832, seguida de Sevilla, con 512.032; Cádiz, con 365.941; Córdoba, con 285.974; Granada, con 267.141; Jaén, con 216.217; Almería, con 194.596; y Huelva, con 166.386.  

Igualmente, durante al año pasado se dieron de baja en la comunidad 72.944 animales de compañía y se registraron 39.881 cambios de propietario. Igualmente, según los datos del registro oficial, se perdieron 8.555 mascotas, y fueron encontradas 4.827. 

En lo que a expedientes sancionadores se refiere, la cifra de casos abiertos ascendió a 1.912, un 10,5% menos que en 2019, de las que 1.167 estuvieron relacionados con perros de raza potencialmente peligrosas (control de la licencia, seguro y medidas de seguridad, es decir, correa y bozal). El resto fueron expedientes sobre vigilancia, registro del animal y prevención del maltrato.

Nueva Ley de Bienestar Animal

Hace tan solo unas semanas, la Junta dio luz verde a la tramitación del anteproyecto de Ley de Bienestar Animal, cuyos objetivos son promover el abandono cero y acabar de forma progresiva con el sacrificio de animales en la comunidad. La norma regulará, como principales novedades, la circulación y acceso a espacios y transportes públicos y las zonas de esparcimiento, así como el tratamiento de los animales de compañía en situaciones de violencia de género, de forma que las administraciones faciliten que las personas que ingresen en centros de acogida o pisos tutelados puedan hacerlo con sus mascotas, siempre que estas estén debidamente identificadas y registradas.

"Es necesaria una nueva ley que sustituya la vigente, que data de 2003. Una ley que era buena, pero que se quedó obsoleta en algunos asuntos", asegura a 20minutos Fidel Astudillo, presidente del Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Veterinarios (CACV). Esta actualización, continúa, "es necesaria para dar respuesta a una actual sociedad andaluza que se encuentra especialmente sensibilizada y concienciada sobre la necesidad de potenciar el respeto, la protección y el bienestar de los animales".

Hace dos años, el CACV y los diferentes colegios de veterinarios "ya presentamos a los grupos parlamentarios la necesidad de una reforma o una nueva Ley de Bienestar Animal", afirma Astudillo, quien explica que en los últimos años han participado "muy activamente" en la elaboración del proyecto a través de jornadas y mesas redondas. Los temas más tratados en estos encuentros han sido en materia de "funcionamiento de nuevas leyes, procedimientos sancionadores, código penal, colonias felinas, sacrificio cero, centros de acogida, mutilaciones, tenencia responsable, identificación y registros".

Actualmente, "se está trabajando mucho para terminar de actualizar la ley". "Hay que ver las alegaciones de todos los sectores implicados e ir perfilando su aprobación y publicación final para el beneficio de todos", concluye Astudillo, quien recuerda que los veterinarios son "imprescindibles" en esta nueva ley, puesto que son los "garantes del bienestar animal" y, por tanto, su presencia es "fundamental en ámbitos tan importantes como la identificación, el registro, la sanidad, vacunaciones, eutanasias, esterilizaciones, mutilaciones, denuncias o control".