Revalorizar las pensiones con el IPC, incentivos de hasta 12.000 euros por año retrasado de jubilación... Son algunas de las propuestas anunciadas este lunes por el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, de cara a la futura reforma de las pensiones que prepara el Gobierno.

Escrivá propone pagar hasta 12.000 euros a quienes decidan no jubilarse a los 67 años

Escrivá ha explicado este lunes ante la Comisión Parlamentaria del Pacto de Toledo las opciones que se barajan para fomentar la permanencia de trabajadores en activo y evitar la discriminación por edad.

Así, las propuestas que ha presentado a la mesa de negociación con los agentes sociales son:

'Premio' para el que retrase la jubilación y 'castigo' para el que la adelante

Para impulsar la jubilación demorada, el ministro ha propuesto una serie de incentivos, que pasan por un "cheque" de hasta 11.000 euros por cada año de demora en el caso de pensiones máximas, que podría incrementarse un 10% adicional en carreras de cotización largas (más de 44 años y medio) acercándose a los 12.000 euros. 

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Otra opción sería un incremento del 4% de la cuantía de la pensión inicial por cada año de demora (frente al esquema actual que oscila del 2% al 4%), o una combinación de ambas propuestas

También se plantean reducir hasta un 21% la de quienes se jubilen anticipadamente. Concretamente, ha explicado que se está trabajando en el diálogo social en una propuesta de coeficientes reductores a la jubilación anticipada voluntaria por la que estos aumentarían del 16% al 21% para un trabajador con menos de 38 años y 6 meses cotizados que quiera jubilarse dos años antes de lo que le toca.

En el caso de la jubilación anticipada involuntaria, Escrivá ha señalado que a los trabajadores que vengan de cobrar el subsidio de desempleo se les aplicará coeficientes reductores y que también se revisarán estos para rebajarlos y que tengan efecto de forma mensual.

Flexibilizar la jubilación parcial

Otra de las medidas para acercar la edad real a la legal de retiro, ha explicado Escrivá, es flexibilizar el uso de la jubilación parcial, limitando al mismo tiempo su abuso. Así, propone que solo se pueda concentrar en el primer año hasta el 60% de la jornada (frente al 100% de la actualidad), aunque se permitirá mantener en algunos casos el actual sistema, en el que el trabajador trabaja a tiempo completo el primer año y en el segundo no lo hace en absoluto.

Subir las pensiones con el IPC

La opción que defiende el Ejecutivo para revalorizar las pensiones es vincularlas al IPC. Se haría, según ha explicado el ministro, con el IPC del año anterior y con la opción de ajustar en los tres años siguientes si la inflación es negativa. "Estamos discutiendo cómo ver esa compensación en deflación para que no haya sesgo de ganar poder adquisitivo", ha afirmado.

Exoneraciones en las cuotas

Con el mismo objetivo de retrasar la edad de jubilación, también ha planteado exoneraciones en las cuotas a la Seguridad Social de empresas y trabajadores de forma generalizada y sin las restricciones existentes en la actualidad.

Trece tramos para autónomos

Otro de estos puntos es el nuevo sistema para que los autónomos empiecen a cotizar por ingresos reales y donde Escrivá ha detallado que se están planteando 13 tramos distintos para ajustar cotizaciones y que la idea es una implantación gradual a partir del 1 de enero de 2022, con un período transitorio. Según el ministro, "cuantos más tramos, cada trabajador tiene más posibilidades de adaptación a su capacidad de pago".

También están en este bloque los considerados "gastos impropios" por parte del Estado, Escrivá ha defendido que supondrá la eliminación del déficit presupuestario en 2023.