La Universidad de Barcelona pondrá en marcha un sistema de docencia mixta -presencial y a distancia- para el curso 2020-2021, como medida de seguridad para evitar la propagación de la Covid-19. Lo ha anunciado este viernes el rector de la UB, Joan Elias en rueda de prensa.

"El curso 2020-2021 será un curso excepcional que se organizará en el entorno de un modelo de docencia mixta", ha afirmado Joan Elias. Se combinarán, pues, clases presenciales con grupos reducidos en espacios grandes, y clases telemáticas, con interacción entre alumnos y profesores.

Las clases presenciales estarán "condicionadas por las necesidades de los estudiantes, las características de las asignaturas y las disponibilidades de los espacios físicos", ha explicado la Universidad. Igualmente, ha apuntado que no se cierra la posibilidad de tener una docencia presencial en el segundo semestre, "de acuerdo con las directrices de las autoridades sanitarias y poder hacer los ajustes necesarios en la planificación", ha apuntado el rector.

En cuanto al porcentaje de presencialidad en los diferentes centros de la UB, el rector ha explicado que cada titulación es diferente y cada edificio también. "Por lo tanto, hemos dejado total libertad para que los centros decidan para cada titulación, e incluso asignaturas, qué tipo de docencia pueden hacer", ha señalado. Sin embargo, se recomienda en los centros intensificar la presencialidad en el primer curso, "para poder dar una atención específica a los estudiantes que llegan por primera vez a la Universidad". 

Compra de 1.600 portátiles

El rector también ha destacado la inversión que ha hecho la UB en la adquisición de ordenadores portátiles que tienen que sustituir a los ordenadores fijos y permitir el trabajo a distancia y la docencia en linea. "La UB ha destinado 1,8 millones a comprar portátiles para PAS y PDI. Esto supone unos 1.600 ordenadores". Así mismo, se ha invertido medio millón de euros a adaptar aulas en los centros para poder grabar y transmitir las clases en linea.

Todo esto va acompañado de la puesta en marcha del programa de formación RIMDA - Docencia mixta, que tiene como finalidad ofrecer apoyo y asesoramiento al conjunto del profesorado de la UB ante los retos que plantea el inicio de curso, en el marco excepcional generado por la crisis de la COVID-19.

Para facilitar la adaptación a la docencia mixta, el rector ha destacado dos medidas que ya se utilizaron en la UB durante el confinamiento: por un lado, el programa de ayudas 'Connecta UB', del que se hará una nueva convocatoria. Por otra parte, también se ampliará el programa de becas propio 'bkUB', destinado a los estudiantes de grado y máster universitario que se encuentren en una dificultad económica sobrevenida que no les permita de asumir el importe de la matrícula.

Durante el segundo semestre del curso pasado, más de 300 estudiantes utilizaron el 'Connecta UB', pensado para garantizar la conexión a Internet y el uso temporal de ordenadores para seguir las lecciones a distancia. El programa 'bkUB', dotado con 300.000 euros, también se adaptará a la nueva situación de crisis económica, según ha informado la Universidad.

Por último, el rector ha recordado que la UB tiene un Plan de contingencia propio, que deriva del Plan sectorial de universidades aprobado por el PROCICAT el 29 de junio, y que cumple, además, con la normativa sanitaria aprobada por las autoridades competentes con posterioridad. Este plan se irá actualizando con las recomendaciones y medidas que adopten las autoridades políticas y sanitarias durante el curso. Las medidas establecidas en el plan son de aplicación al conjunto de la comunidad universitaria, que incluye todas las personas que accedan a las instalaciones de la Universidad. Así mismo, se han establecido protocolos específicos de limpieza y desinfección, así como de mantenimiento de las instalaciones.