Los ayuntamientos españoles podrán gastar parte de su superavit y remanente para cubrir los gastos generados por la Covid. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha propuesto a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) que las administraciones locales puedan gastar una parte de los 28.000 millones que atesoran las arcas municipales en remanentes de tesorería. Se les permitirá emplear 5.000 millones  en gasto relacionado con movilidad, vivienda, asistencia social, educación o cultura.

Para que los ayuntamientos dispongan de este dinero, antes tendrán que hacer un préstamo al Estado por el montante total de sus ahorros -28.000 millones-. De ellos, Hacienda transferirá entre 2020 y 2021 el 35% de esos fondos. El resto, se lo quedará, con la condición de devolver el préstamo municipal en 10 años. Con esta propuesta Montero cumple en parte la intención de poder gestionar los remanentes de los ayuntamientos que manifestó hace semanas en una reunión con consejeros autonómicos de Hacienda.

El presidente de la FEMP y alcalde de Vigo, Abel Caballero, no ha confirmado este miércoles todavía que haya acuerdo en torno a la propuesta de Hacienda, pero ha afirmado que la negociación con Montero "está muy encaminada". Ahora, convocará a la Junta de Gobierno de la FEMP, previsiblemente para este viernes, donde sus 25 vocales de los distintos partidos deberán pronunciarse.

PSOE y PP han mantenido un frente común dentro de la FEMP para reclamar al Gobierno que permitiera a los ayuntamientos gastar sus ahorros, hasta ahora en su totalidad, 28.000 millones. Ahora, la propuesta de Hacienda puede provocar una ruptura en esta entente. Frente al optimismo del socialista Caballero, el PP no ha querido este miércoles abundar en la valoración de la oferta de y se ha limitado a señalar que espera una que sea "seria y oficial".

Hacienda asegura que cambiará la ley para que los ayuntamientos puedan gastar su superavit contra la Covid

En concreto, fuentes del Gobierno indican que podrán destinar estos fondos al incremento de la oferta de vivienda de alquiler o construcciones de carriles bici,  cuidados de proximidad como programas de mayores y dependientes, ayuda a domicilio y teleasistencia, y cultural.

Con este dinero también podrán reforzar sus servicios telefónicos de atención y protección para víctimas de violencia de genéro y a actividades lúdicas y educativas, como la puesta en marcha de campamentos de verano o construcción y mejora de escuelas de 0 y a 3 años.

En el capítulo de cultura, los ayuntamientos podrán hacer promoción, acciones para recuperar su Patrimonio Histórico o digitalizar bibliotecas o museos.

5.000 de 28.000 millones

Estos 5.000 millones forman parte del remanente de tesorería de los ayuntamientos españoles, que asciende a una cifra total de unos 28.000 millones. Desde que empezó la pandemia, ha sido constante la reclamación de los alcaldes de todo signo político para que el Gobierno permitiera gastar estos fondos, algo que prohíbe la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que solo permite gastar superávit y remanente para amortizar deuda.

Hace unas semanas, Montero se mostró dispuesta a negociar con la FEMP la manera de permitir a los ayuntamientos gastar parte de sus ahorros sin incurrir con ello en déficit público. 

Fuentes del Gobierno indican que la propuesta de Hacienda permitirá que los ayuntamientos aumenten sus ingresos y, con ello, su capacidad de gasto. En concreto, en 2020 dispondrán de 2.000 millones y en 2021, de 3.000 millones.

El procedimiento que plantea Hacienda para desembolsar este dinero de nuevo en las arcas municipales consiste en que los ayuntamientos constituirán voluntariamente un préstamo a favor de la Administración General del Estado por el total de sus remanentes de tesorería. Con este importe, Hacienda realizará un ingreso no financiero en 2020 y 2021, que como mínimo representará el 35% de los fondos aportados y que llegará hasta 5.000 millones.