La ciencia recibirá un impulso inmediato por parte del Gobierno precisamente cuando la pandemia ha dejado al aire las grietas y las deficiencias de un sistema cuya financiación se ha venido recortando paulatinamente en los últimos años.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reconocido la importancia de los científicos en una rueda de prensa en Moncloa en la que ha anunciado un plan de choque con un presupuesto de 1.056 millones de euros en ayudas directas a la que hay que sumar 500 millones de euros en prestamos en condiciones ventajosas para empresas innovadoras.

El presidente ha explicado que el plan no pretende cubrir el conjunto de actuaciones públicas en torno a la ciencia, sino que contiene únicamente "soluciones a corto plazo" y está diseñado para complementarse con el plan a largo plazo que se financiará con fondos provenientes de Europa.

"Tras más de una década relegada sufriendo las consecuencias de los recortes, el sistema científico y la innovación española necesitan un plan de choque", ha declarado Sánchez, que se ha dirigido directamente a la comunidad científica: "Nunca antes el planeta entero había sido consciente de vuestra importancia en tiempo real".

El "plan de choque" diseñado por el Gobierno se sustentará sobre tres ejes prioritarios; el primero es la investigación biosanitaria, y para ello el Ejecutivo se plantea reforzar el Instituto de Salud Carlos III -dependiente del Ministerio de Ciencia- y las áreas más relacionadas con la investigación epidemiológica y la medicina preventiva, para mejorar las capacidades de España frente a crisis sanitarias como la que ha causado el SARS-CoV-2.

El segundo eje es el relacionado con la reforma del sistema español de ciencia y tecnología, con el objetivo de reforzar y agilizar las convocatorias y de retener y atraer el talento.

El tercer pilar del plan está relacionado con la innovación empresarial, e incluye medidas para ayudar a impulsar la capacidad innovadora de las empresas, para favorecer la colaboración público-privada en esta materia y para facilitar la transferencia de conocimientos y tecnología desde los centros de investigación hacia la industria.