El uso de mascarillas será obligatorio también en la vía pública y en espacios cerrados cuando no se pueda garantizar el cumplimiento de la distancia mínima de seguridad entre personas, fijada en dos metros, además de cuando se viaje en transporte público. Así lo han acordado este lunes el Gobierno y las Comunidades Autónomas durante la reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SMS).

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De esta forma, al uso ya obligatorio en el transporte público su sumará ahora la utilización obligatoria en espacios cerrados y en la vía pública si no es posible garantizar la distancia mínima de seguridad de dos metros.

El departamento dirigido por Salvador Illa ha indicado que el uso de las mascarillas quedará regulado en una orden ministerial que se publicará en los próximos días.

Además, durante la reunión se ha informado del nuevo sistema de comunicación de datos entre comunidades y el Ministerio de Sanidad, que se hará por la mañana, a diferencia de lo que se venía haciendo hasta ahora, que el volcado de datos era a última hora de la tarde de cada día.

El ministro ha anunciado el envío de guantes y de mascarillas a todas las comunidades; y se va a dar autonomía a las comunidades autónomas para que fijen los detalles de ciertas actividades dentro de la fase 2, en concreto a lo referido a las visitas a los centros de personas mayores.

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Durante la reunión, han sido varias las comunidades que han aprovechado para comunicar a Salvador Illa su intención de ir avanzando en la denominada desescalada. Algunas, incluso, ya han facilitado alguna de las justificaciones que harán llegar a Sanidad junto a información técnica.

Madrid

La Comunidad de Madrid no ceja en su empeño de avanzar a la fase 1 pese a las dos negativas que acumula del Gobierno central. Este lunes, el consejero madrileño de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, le anunció a Salvador Illa que esta semana volverán a tramitar una petición. El Ejecutivo de la Puerta del Sol tiene intención de remitir nueva documentación al ministerio en la noche de este lunes.

Cataluña

La Generalitat observará los datos de evolución de la epidemia en las comarcas de Camp de Tarragona, Terres de l´Ebro y el Valle de Arán (las tres en fase 1 desde el 11 de mayo) para solicitar su pase al segundo estadio de la desescalada el 25 de mayo. Todo hace pensar que será así porque en estas zonas de Cataluña los indicadores son buenos.

Mientras tanto, de momento se desconocen los planes de la Generalitat para Barcelona y su área metropolitana, que están en la fase 0,5 como Madrid. El Gobierno catalán se ha mostrado en todo momento muy cauto con la desescalada en esta zona, que tiene alta densidad de población.

Andalucía

La Junta tiene previsto solicitar el avance de las ocho provincias andaluzas a la fase 2 desde el próximo lunes. Salvo Granada y Málaga, que inauguraron este lunes la fase 1, el resto de demarcaciones avanzó el pasado 11 de mayo. El Gobierno andaluz confía en que los dos últimos territorios en incorporares no tengan que esperar 14 días para cambiar de estadio, pues supondría una desescalada "a dos velocidades".

Comunidad Valenciana

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, pidió este lunes a los valencianos "prudencia y precaución" en los primeros días en fase 1 para poder seguir avanzando en el desconfinamiento el próximo lunes. "La Comunitat está en condiciones para pasar a fase 2 la semana que viene, pero lo vamos a ver con el ministerio desde la cogobernanza y la codecisión", señaló Puig.

País Vasco

Este lunes, coincidiendo con la flexibilización de movimientos entre municipios de territorios históricos vecinos, el Gobierno vasco dio por superada la fase de emergencia sanitaria.

Los indicadores epidémicos han ido a la baja en los últimos días y, de continuar esta tendencia, el Ejecutivo autonómico cree que están en condiciones de pasar de fase 2 el 25 de mayo.

No obstante, el lehendakari Ínigo Urkullu apeló a la responsabilidad de la población: "a mayor movilidad, mayor debe ser la protección individual a adoptar", recordó.

Castilla-La Mancha

La totalidad de la región vivió este lunes su primer día en fase 1 y el presidente castellano-manchego, Emiliano García-Page, apuesta por seguir controlando la movilidad interprovincial en las próximas jornadas para poder ir avanzando en la estrategia de desescalada. La disciplina de los ciudadanos con las medidas de confinamiento "ha evitado muchas muertes", aseguró García-Page.