'El programa de Ana Rosa' organiza un reencuentro entre Ainhoa Arteta y su alumno de 19 años ingresado en IFEMA

Bryan, un joven de 19 años que dejó su país natal, Cuba, para cumplir su sueño de ser un cantante de lírico profesional, vio cómo su camino se detuvo por el coronavirus. El chico se contagió de COVID-19, al poco de llegar a España, y tuvo que ser ingresado en IFEMA. 

Sin familia en este país, cuando la enfermera pidió a Bryan un número de teléfono para reportar a alguien cercano, el joven facilitó el contacto de su profesora de ópera. La maestra del cubano resultó ser la conocida Ainhoa Arteta, a la que conoció durante una clase magistral en el país sudamericano.

El joven se trasladó hasta España para profesionalizarse y, cuando llegó a suelo europeo, se puso en contacto con "su musa", la cantante española, a través de Facebook. Tras encontrar trabajo como obrero y vivir en un piso patera, su vida se vio paralizada cuando tuvo que ser hospitalizado por coronavirus. 

El programa de Ana Rosa ha querido sorprender al joven artista y ha organizado un reencuentro con la cantante de lírico. Bryan, emocionado, casi no podía articular palabra cuando ha escuchado la voz de su maestra. Arteta ha alabado la valentía de su alumno por dejar toda su vida y a su familia a miles de kilómetros para luchar por su sueño.

El cantante ha explicado que tuvo complicados problemas de salud, pero que ya se encuentra fuera de peligro, "No estuve malito, malito, pero no estuve bien", ha dicho el joven. Cuando su salud se lo permitió, el cubano regaló a los sanitarios y al resto de pacientes hospitalizados en IFEMA un recital en directo para levantar el ánimo a todos los que estaban pasando unos días difíciles. 

Ainhoa Arteta ha agradecido a todos los voluntarios y organizaciones de la Comunidad de Madrid que "se han volcado para ayudar a Bryan". El joven está actualmente residiendo en una vivienda facilitada por el Ayuntamiento de la capital.