La Generalitat de Cataluña ha dado este miércoles marcha atrás al plan que había anunciado para paralizar todas las obras públicas de su competencia como medida para hacer frente a la crisis del coronavirus.
El Govern aprobó el pasado martes el decreto ley 7/2020 que, entre otras medidas, contemplaba la suspensión de "los contratos de obra y de servicios o asistencias vinculados, contratados por la Administración de la Generalitat o su sector público", excepto aquellos considerados "de carácter básico o estratégico".
La paralización de la obra pública de la Generalitat tenía que entrar en vigor este miércoles, pero en el último momento, el Govern ha introducido una pequeña pero sustancial modificación a su propio decreto ley que deja en manos del contratista la decisión de suspender o no la obra.
La Generalitat remite ahora al Real decreto del Gobierno
Concretamente, la modificación del artículo 6 introducida este miércoles dice que "los contratos quedan sujetos a la regulación prevista en el Real decreto ley 8/2020" del Gobierno. Es decir, remite a la normativa aprobada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez al decretar el estado de alarma.
Este paso atrás de la Generalitat es sorprendente porque el Govern lleva diez días exigiendo el confinamiento total y la paralización de toda la actividad no esencial en Cataluña. Durante todo este tiempo, sin embargo, ha mantenido activas las obras públicas de su competencia y este miércoles, cuando se supone iba a detenerlas, da un paso atrás para dejar esa decisión en manos de las constructoras.
Es más, el propio president, Quim Torra, ha vuelto a insistir este miércoles por la mañana, antes de publicarse la modificación de su decreto en el Diari Oficial de la Generalitat, en la necesidad de paralizar todas las obras de construcción al considerar que no son un "trabajo esencial" y exponen a los operarios al coronavirus.
Quim Torra: "Apelo a que todos los trabajos de construcción que no son esenciales, sencillamente se paren"
"Apelo a que todos los trabajos de construcción, que entendemos que no son esenciales, sencillamente se paren", había afirmado en la sesión virtual en el Parlament. También el vicepresident, Pere Aragonès, había criticado a Sánchez en esa sesión parlamentaria por no paralizar la construcción.
La justificación del Govern para dar marcha atrás en su decisión de frenar la obra pública catalana es que se han limitado a adaptar su normativa "a la norma estatal" para no crear inseguridad jurídica.
El Ayuntamiento de Barcelona sí ha paralizado la obra municipal
La teniente de alcalde de Urbanismo de Barcelona, Janet Sanz, ha sido muy crítica con la Generalitat por no paralizar su obra pública. "Antes de dar lecciones de confinamientos, que comiencen por su casa", ha escrito en Twitter.
Janet Sanz: "Antes de dar lecciones de confinamientos, que empiece por su casa"
"El otro día escuchaba a Quim Torra decir que había que elegir entre vida o economía y hoy da un paso atrás en la decisión de parar las obras públicas por miedo a indemnizaciones. ¿Entiendo, presidente, que ha elegido economía?", ha insistido la regidora de En Comú.
Sanz le ha recordado al Govern que el Ayuntamiento de Barcelona ya paralizó las obras públicas municipales "hace nueve días" y que otros consistorios, como "Lleida, Tarragona o Sant Cugat" han hecho lo mismo.
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