El Gobierno y las comunidades autónomas han decretado este lunes las primeras medidas restrictivas para combatir el coronavirus, después de que los contagios se dispararan desde los 660 hasta superar los 1.200 en una sola jornada y el número de víctimas mortales llegara a 30.

La propagación de la enfermedad se ha producido sobre todo en la Comunidad de Madrid y en las poblaciones alavesas de Vitoria y Labastida, decretadas como "zona de transmisión alta" por el Ministerio de Sanidad, que ha ordenado allí la suspensión de las clases desde infantil a universitaria durante 14 días.

"Los datos indican un cambio a peor", ha admitido el ministro de Sanidad, Salvador Illa, en una rueda de prensa este lunes por la tarde en la que ha anunciado que el escenario pasaba de contención a "contención reforzada" y en la que ha anticipado que este martes se presentarán nuevas medidas.

"Vista la evolución de la enfermedad, era preciso tomar estas medidas. Sé que son medidas que no gustan, que alteran el quehacer normal de muchos ciudadanos, pero lo único que puedo decir es que las tomamos porque creemos que son necesarias", ha declarado Illa.

Además de esta medida, Illa también ha anunciado una serie de "recomendaciones" para que, en estas zonas, "siempre que sea posible, se adopten medidas de teletrabajo, flexibilización de horario laboral y también se eviten, en la medida de lo posible, las reuniones presenciales".

Madrid y País Vasco, principales focos

Los positivos comenzaron a aumentar al mayor ritmo desde la llegada de la enfermedad a España el pasado 31 de enero desde el domingo por la tarde, la gran mayoría en Madrid y País Vasco, las dos únicas zonas con transmisión comunitaria.

El cierre de centros educativos anunciado por el ministro de Sanidad comenzará en Madrid este miércoles y afectará a 1,2 millones de alumnos. La medida ya había sido anticipada por el Gobierno vasco en las localidades de Vitoria, Laguardia y Labastida y entrará en vigor este martes hasta el 23 de marzo, después de que el número de contagios ascendiera a 149, 47 más que el domingo, y los fallecidos a seis, uno más.

"Nuestro objetivo es que la sociedad comprenda y atienda las recomendaciones que van a plantear las autoridades sanitarias", declaró el lehendakari, Iñigo Urkullu, que señaló que "las medidas de autoprotección son fundamentales".

Entre los casos conocidos este lunes está el de un bebé de cinco meses, ingresado en el Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia que, en caso de confirmarse, sería el contagiado más joven de España. La madre del bebé también está hospitalizada tras dar positivo por coronavirus.

En La Rioja, la tercera comunidad con un mayor número de casos, que este lunes ascendió a 81, la Guardia Civil y la Policía Nacional continuaron notificando de aislamiento a varios afectados por coronavirus en Logroño y en diferentes municipios, al igual que se hizo el domingo en la ciudad de Haro, donde se concentran la mayoría de los afectados.

Cuidado domiciliario de los mayores

La enfermedad sigue siendo letal esencialmente para personas de avanzada edad y con patologías respiratorias previas, por lo que el ministro Illa ha pedido "fomentar el cuidado domiciliario de los mayores" y ha recomendado expresamente a "todos los que tengan enfermedades crónicas o pluripatologías que limiten su salida de su domicilio y su actividad social".

Por la mañana, la Secretaría de Estado de Derechos Sociales envió un documento técnico a todas las comunidades autónomas en el que aconsejaba que los ancianos usuarios de residencias permanecieran en habitaciones con buena ventilación, preferiblemente al exterior, con baño propio y con la puerta cerrada.

Este lunes, también se ha conocido que Instituciones Penitenciarias había ordenado el pasado viernes a todas las prisiones que suspendan las visitas y comunicaciones a los internos de personas de "zonas de transmisión comunitaria" del coronavirus.

Además de las restricciones de visitas a presos que se comunicarán al juez de vigilancia penitenciaria correspondiente, se prohibirán las salidas a diligencias judiciales de reclusos que hayan dado positivo en coronavirus o sean sospechosos. En ambas situaciones los presos tampoco podrán ser trasladados a otros centro penitenciarios "salvo por razones estrictamente sanitarias".