Aunque en un primer momento todo apuntaba a que había vuelto a tener una recaída en el cáncer que padece desde 2018, al final todo quedó en un susto (y en una gastroenteritis). Así lo confirmó Ana Obregón, quién, además, quiso aclarar que fue ella quien contagió a su hijo Álex Lequio y que el ingreso del que ahora todos hablaban poco tenía que ver con el tumor maligno del joven. Ahora, la actriz ha querido informar de que "todo está bien" y de que, por fin, pueden volver a casa, donde el joven empresario aún deberá guardar unos días de reposo.

Lo ha hecho en la puerta del hospital, donde se arremolinaban algunos periodistas. Sin bajarse del coche, les ha querido saludar y dar el parte de salud del hijo que comparte con Alessandro Lequio, asegurándoles que estaban contentos y que la gastroenteritis que tantos titulares había ocupado ya es cosa del pasado.

Rumores de recaída

Cabe destacar que los rumores de una posible recaída en el cáncer comenzaron tras unas declaraciones del conde Lequio a los medios, a los que aseguró que "es una enfermedad larga y dura. Él está esperanzado y nosotros también". Así se hacía eco Lecturas, entre otros medios, donde también destacaban que el progenitor aseguraba que no había una fecha para el alta y que, por ello, se lo estaban tomando "todo con mucha tranquilidad".

Sus palabras hicieron pensar a muchos que el joven podía estar de nuevo recibiendo tratamiento, pero, pronto, Ana Obregón se encargó de contar en la revista Corazón que, esta vez, el cáncer contra el que luchan desde el verano de 2018 no era el culpable de su ingreso y que, una vez más, Álex se lo estaba tomando todo con el positivismo que le caracteriza. Y es que, el joven Lequio eso de "al mal tiempo, buena cara" lo lleva como bandera, pues, en más de una ocasión –y habitualmente a través de sus redes sociales– ha demostrado una actitud alegre (incluso con los errores sobre su estado de salud) y unas ganas de disfrutar y trabajar envidiables.