Una fotografía del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, cenando en un restaurante de Chueca este miércoles por la noche han suscitado todo tipo de críticas e incluso han llevado al PP a pedir su dimisión, pues le afean que estuviera en un bar mientras cundía el caos en las calles de Cataluña. El socialista ha explicado que salió una hora a comer una hamburguesa con su jefe de gabinete y continuar trabajando, y ha asegurado que no dejará su puesto.

"Me fui a cenar brevemente con un miembro de mi gabinete para seguir trabajando", ha detallado Grande-Marlaska en una entrevista en RTVE, donde ha señalado que permaneció en su despacho desde las ocho de la mañana hasta las once de la noche, cuando salió una hora para comer algo y volver después al Ministerio.

Las críticas por parte del PP han llegado a primera de la mañana con un tuit del secretario general de la formación, Teodoro García-Egea, en el que se hacía eco de una publicación de OkDiario en la que se veía al ministro en el restaurante Válgame Dios, del madrileño barrio de Chueca. Más tarde, ha sido la cuenta del partido la que compartiría el artículo.

"El Gobierno de Sánchez está sobrepasado. Su ministro del Interior debe dimitir. En el peor momento, cuando miles de policías se parten la cara defendiendo a los catalanes de los violentos, su máximo responsable no parecía muy preocupado", ha escrito García Egea.

El ministro ha mostrado su digusto con esta actitud de los populares y ha criticado este tipo de ataques. "No me parece serio, y lo digo así de claro, esa política califica a quien la realiza", ha apuntado.