Los smatphones se han convertido en un elemento fundamental de nuestras vidas. Se usan a diario, cada hora y en multitud de ocasiones. Comunicarse y hacer presencia en las redes sociales ha provocado que seamos prácticamente 'adictos' a nuestros teléfonos móviles, incluso al volante.

Casi la mitad de los conductores españoles (48,2%) utiliza su smartphone sin manos libres, lo que causa unas 390 muertes al año, un 20% del total de fallecidos al volante, según el primer estudio sobre el impacto de la adicción al móvil en los accidentes de tráfico.

"Estamos ante un problema que es reflejo de cómo es nuestra sociedad. Estamos todos 'colgados' a los móviles", señala a 20minutos.es Francisco Valencia, director general de la Fundación Línea Directa, encargada del informe 'Smartphones: el impacto de la adicción al móvil en los accidentes de tráfico' junto al Instituto Universitario de Investigación de Tránsito y Seguridad Vial de la Universidad de Valencia (INTRAS).

El estudio concluye que la distracción es una de las principales causas de muerte al volante (33%), le siguen la velocidad (29%) y el alcohol (26%). Además, unos 600.000 conductores son adictos al móvil y no pueden dejar de mirarlo mientras conducen.

Entre las actividades más peligrosas está el uso de Whatsapp (el 37%), para la que el conductor emplea unos 20 segundos de media y recorre una distancia de 600 metros. Le sigue la utilización del navegador y las llamadas. Pero la cosa no queda ahí, dos millones de conductores reconocen haberse hecho selfies conduciendo.

Cinco millones de conductores han vivido situaciones de riesgo por culpa del uso del móvil en la conducción. El perfil de la persona que utiliza el teléfono al volante tiene entre 18 y 24 años y lo hace en zonas urbanas -semáforos y atascos-. Está muy igualado entre sexos, aunque es ligeramente superior en el caso de los hombres. Los accidentes más comunes por la utilización del móvil suelen ser alcances o salidas de vías.

Desde 2016 se han incrementado las sanciones por hablar por el móvil en un 13,2%. En total, los españoles han perdido 2,8 millones en los últimos cinco años. Sin embargo, 11 millones de conductores (el 40,5%) desconocen la normativa sobre el uso del móvil en la conducción, actualmente sancionado con tres puntos y 200 euros.

Valencia señala que en este apartado se da una paradoja: los conductores desconocen la normativa, están en contra del uso del móvil al volante pero confiesan que lo utilizan habitualmente: "Casi el 90% cree que hay que endurecer las sanciones, considerarlo como delito".

La mayoría justifica su utilización por si "tienen algo urgente", el 6,5% por trabajo, el 5,8% por costumbre y el 1,6% por aburrimiento. En Murcia, Galicia y Madrid el porcentaje de conductores que utilizan el móvil al volante supera la media nacional, mientras que las Comunidades Autónomas con el porcentaje más bajo son Asturias, Extremadura y La Rioja.

El director de la fundación considera que para reducir el porcentaje de accidentes de este tipo es necesario "concienciar a la población" y después tomar medidas para reducir la "tentación". "Cada vez más móviles incluyen un modo 'al volante', como el 'modo avión' que es muy interesante y evitaría accidentes si la gente los utilizase".

"Tengo un amigo que tuvo un susto gordo por mirar el móvil mientras conducía. Después de eso, lo que hace es guardar el teléfono en la chaqueta y dejarla detrás, así no tiene la tentación de mirarlo", relata Valencia, que insiste en evitar tener el móvil a la vista, porque "que tire la primera piedra" quien no lo haya mirado teniéndolo delante.