Isabel Díaz Ayuso se ha presentado este martes, en la primera de las dos jornadas del pleno de investidura de la Comunidad de Madrid en el que será elegida presidenta, como el baluarte contra las políticas del Gobierno de Pedro Sánchez y el "intervencionismo de la izquierda".

Ayuso, que este miércoles se convertirá en la baronesa con mayor poder del Partido Popular, presentó su programa de Gobierno ante la Asamblea regional, a la que no acudió el presidente de su partido, Pablo Casado, con un discurso marcadamente patriótico y plagado de referencias a cuestiones de política nacional.

"En este momento tan convulso políticamente, Madrid es la pieza clave de nuestro país", ha declarado Ayuso, que se ha comprometido al "respeto de los símbolos del Estado", ha alabado a la monarquía y ha definido a España como "la nación más antigua de Europa, patria indivisible y común de todos los españoles".

La candidata del Partido Popular realizó también numerosos guiños a Vox, el partido que el miércoles dará el apoyo clave para la formación del Gobierno de coalición del PP y Ciudadanos y que exigió que el nuevo Ejecutivo asumiera una serie de políticas para darle su apoyo Ayuso.

"Será obligatorio que todos los colegios con fondos públicos tengan que anunciar sus talleres y charlas antes de que comience el curso", ha declarado Ayuso, en clara referencia a los talleres sobre temática feminista y sobre derechos LGTBI, que han estado en el foco de las críticas de Vox.

"Hay que combatir el machismo, pero no a los hombres. Los problemas de las mujeres hoy en España son prácticamente los mismos que los de los hombres", ha indicado Ayuso.

Los días previos a la investidura han estado marcados por la revelación de una serie de informaciones que vinculan al entorno de Ayuso y a la propia candidata con distintos casos de corrupción, entre ellos, la trama Púnica, en la que aparece mencionada en el sumario del caso.

"Tenemos un compromiso de tolerancia cero contra la corrupción", ha declarado Ayuso, despertando una irónica y sonora ovación en la bancada de Más Madrid y Unidas Podemos.

En declaraciones ante los medios tras el pleno, Ignacio Aguado, portavoz de Ciudadanos y próximo vicepresidente del Gobierno de Ayuso, ha asegurado que espera que "no haya ningún resquicio ni ninguna corrupción en el Gobierno" que compondrán en coalición la formación naranja y el PP a partir del miércoles.

"Si hubiera cualquier atisbo de corrupción seríamos los primeros interesados nosotros en exigir dimisiones y responsabilidades", ha declarado Aguado, que se refirió a Avalmadrid, la empresa semipública de la que obtuvo un préstamo supuestamente ventajoso el padre de Ayuso, como un "chiringuito desprestigiado y manchado por posibles tramas de corrupción".

El portavoz de Más Madrid, Íñigo Errejón, ha definido la investidura como "ciertamente triste para un Gobierno que nace sometido al chantaje de Vox y bajo la sombra de presuntas irregularidades". Errejón ha calificado además como "inquietantes" las escuetas alusiones de Ayuso a la violencia contra la mujer.

La portavoz de Vox, Rocío Monasterio, tampoco se ha mostrado entusiasta con el discurso de la candidata popular, considerando que ésta había hablando "para sus votantes". Monasterio ha condicionado el voto a favor de su formación a que tanto PP como Cs hagan mención expresa a los puntos que Vox exigió para dar su apoyo a la candidatura de Ayuso.

La sesión se reanudará el miércoles a las 10 de la mañana con las intervenciones de los seis portavoces de los grupos con representación en la cámara y la votación final, en la que, previsiblemente, será elegida Ayuso, tendrá lugar por la tarde.