La huelga indefinida, más dañina para los taxistas que para las VTC

Un grupo de taxistas en huelga frente a un vehículo VTC a las puertas de Ifema.
Un grupo de taxistas en huelga frente a un vehículo VTC a las puertas de Ifema.
MOYA / EFE
Un grupo de taxistas en huelga frente a un vehículo VTC a las puertas de Ifema.

La huelga indefinida de los casi 16.000 taxistas madrileños para lograr que haya en la Comunidad de Madrid una regulación de los vehículos de transporte con conductor (VTC) acaparó la semana pasada la atención mediática y social. Los paros no solo tuvieron consecuencias para el taxi sino que también afectaron a conductores, transporte público y Fitur. Estos son los hechos más destacados de la huelga:

Negociaciones

Las negociaciones entre la Comunidad de Madrid y los representantes de las principales asociaciones de taxistas están en punto muerto. La inclusión de un tiempo mínimo para la precontratación del servicio de las VCT–los taxistas exigían una antelación al principio de seis horas y luego rebajaron sus pretensiones a media hora– encalló las conversaciones. El Gobierno regional pretender legislar pero dejar el tema de la precontratación en manos de los ayuntamiento porque cada municipio es diferente mientras que los taxistas pretenden que haya un tiempo definido y que luego cada ayuntamiento legisle si lo cree necesario. El pasado viernes, Comunidad y Ayuntamiento (que se ofreció a incluir este concepto en una futura ordenanza) acordaron elaborar un borrador que concretase el modo de precontratación de las VTC. El texto incluiría que la contratación del servicio en lugar de hacerse en función del tiempo se hiciese en función de la distancia entre el vehículo que se pide y el cliente.

Balance económico

El conflicto ha generado pérdidas económicas en el sector del taxi. Calculan que en un día un taxi puede ganar entre 60 y 150 euros, pero que en eventos importantes como Fitur, donde hay una enorme afluencia de visitantes, esta cifra aumenta. La otra cara de la moneda son los conductores de vehículos con licencia VTC, que han visto duplicar sus ingresos trabajando las mismas horas ante la falta de competencia, según la estimación de varios conductores. Si normalmente hacen hasta 15 viajes ahora están en los 30.

Sector del taxi

La imagen del taxi se ha deteriorado tras los incidentes protagonizados por algunos manifestantes, lo que perjudica sus reclamaciones de cara a la opinión. Los cortes de carreteras, los enfrentamientos con la Policía o la quema de contenedores en Ifema han tenido más eco que sus demandas.

Uber y cabify

Los otros actores del conflicto son las empresas de VTC que operan en la región, como Uber y Cabify. Las consecuencias que tendría para ellas incluir la precontratación en la futura reforma de la ley serían fatales. El presidente de Unauto (la patronal del sector), Eduardo Martín, insistió la semana pasada en que la precontratación supondría el fin del sector. "De facto, estaríamos hablando del fin de las operaciones de Uber y Cabify en Madrid", afirmó Martín. En la Comunidad de Madrid hay 6.559 vehículos VTC.

Fitur

La afluencia a la Feria Internacional de Turismo no se ha visto afectada. Las estimaciones de visitantes hablaban de más 250.000 personas y parece que la previsión se mantendrá. Los disturbios en Ifema sí que han dañado la imagen de la ciudad y de la feria.

Transporte público

Pese a duplicar las frecuencias y colocar trenes con mayor capacidad en la línea 8, la que llega al recinto ferial de Ifema, registró fuertes aglomeraciones y colapso en los primeros días. El día de la inauguración, transportó a 35.000 personas a Ifema hasta las 10.00 horas.

Más apoyo de la izquierda

Según una encuesta realizada por Metroscopia para este medio, los votantes de izquierda creen más que los taxistas tiene motivos para convocar la huelga que los de derechas. El apoyo en las personas que confían en Unidos Podemos es del 59%. En el caso del PSOE es del 40%.

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