Fernando de la Guardia en 'Cuatro al día'.
Debilidad en la cara, falta de respuesta de los músculos de unos de los lados, párpado y mandíbula caídos y exceso de lágrimas o saliva son algunos de los signos de la parálisis facial. Una afección que en un principio puede ser confundida con un ictus, pero que, en los mejores casos, tarda poco en volver a la normalidad.