La sequía del ciclismo español la cerró Marc Soler con una soberbia victoria en la quinta etapa de la Vuelta. El corredor del UAE, con una exquisita clase, levantó tras 121 veces quedándose a las puertas de una manera u otra los ciclistas patrios. 

Un tuitero se jacta de llamar "paquete" a Enric Mas, publica la reacción del ciclista y acaba borrando el vídeo por las críticas

Una crisis que, de una manera u otra, ha golpeado duramente a España, que ha visto cómo su presencia se ha ido reduciendo cada vez más en las Grandes Vueltas. Una presión que parece haberse disipado, al menos de manera momentánea, con el buen hacer de los corredores españoles en la presente edición de la Vuelta a España.

Si en la quinta etapa fue Marc Soler el que descorchó el champán y hacía sonreír de nuevo a nuestro país, en la sexta también hubo motivos para lucir el orgullo patrio. Los protagonistas de ello, Enric Mas y el jovencísimo Juan Ayuso.

Enric Mas, ¿adiós a los fantasmas?

Enric Mas es uno de los corredores que más tenían que demostrar sobre la carretera. Sobre él recae gran parte del buen papel del Movistar para sumar puntos de cara a la general de la UCI, donde el descenso aprieta. También su abandono en el Tour ha motivado su presencia en Países Bajos para el pistoletazo de salida, necesitaba redimirse del 'fracaso' en la ronda gala.

Y parece que ha conseguido dejar atrás a los fantasmas. Aunque hace falta demostrarlo durante las 21 etapas, en el primer envite de prestigio ha enseñado a todos los rivales que tiene piernas. Soldado a la rueda de un sobresaliente Evenepoel en Pico Jano, el balear mostró sus credenciales con un nuevo tercer puesto en esta edición.

El gran favorito, Primoz Roglic, llegó a casi un minuto de Mas. Una demostración de poderío del español, de esas que necesitaba para insuflar ánimo en el maltrecho ciclismo de nuestro país y que genera ilusión de cara al futuro próximo.

Juan Ayuso, la energía de los jóvenes

Pese a ser el corredor más joven de la Vuelta a España, su nombre es conocido de sobra y ya se le considera como uno de los llamados a tomar el relevo de los Valverde y Cía. en el pelotón. Y lo volvió a plasmar en las duras rampas finales de la sexta etapa. 

Ni corto ni perezoso, Ayuso demarró con fuerza dejando atrás a los gallos de la carrera para lanzarse en la búsqueda del dúo que iba por delante, Mas y Evenepoel. Pese a no llegar a ellos, presentó su carta de bienvenida y se expuso como uno de los grandes 'outsiders' de la Vuelta. 

A sus 19 años ya ha dejado claro que hay mucho futuro y un enorme presente para el ciclismo español. Ayuso y Mas pueden proporcionar grandes tardes en esta Vuelta a España si siguen manteniendo este nivel. Y esperemos que así sea.