El cuarto día de paro de los transportistas transcurre con normalidad en las carreteras y con algún incidente de madrugada (cuatro personas detenidas por quemar dos vehículos en un polígono industrial de Valencia ytambién en Barcelona).
De hecho, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha anunciado que ya no hay problemas en las carreteras, que desde el lunes han sido detenidas 101 personas, y que seguirán garantizando el reparto de combustible, alimentos básicos y medicamentos. Por su parte, el presidente del Gobierno ha prometido "tolerancia cero" contra los piquetes violentos.
La negociaciónPese a que el Ministerio de Fomento
Pese al compromiso de Rubalcaba, el verdadero problema este jueves se centra en el abastecimiento, sobre todo de productos frescos (pescado, frutas y verduras).
Caso especial es el de Toledo, a priori el más perjudicado por la falta de suministro. Según la presidenta del Mercado de Mayoristas de Toledo, Ángela Moreno, "la situación actual es crítica".
En el Mercado del Carmen de Huelva, están cerrados todos los puestos de pescado y veinte de carne. El cierre supone una pérdida de unos 4.000 euros a cada uno.
Los restaurantes están bajo mínimos
El paro de transportistas ya se deja notar en la principal industria española, el turismo. Muchos restaurantes, de playa y de ciudad, y hasta los chiringuitos se quedan sin existencias para atender a sus clientes. En otro sector, el automovilístico, Seat ha anunciado un expediente de regulación temporal de empleo que afectará a 8.000 trabajadores.
Los precios también se resienten
Los precios también sufren las consecuencias del paro de transportistas, tanto que el cierre de muchos comercios y mercados es desde ayer una opción más que probable.
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