Podemos celebrará durante la segunda quincena de octubre una votación entre sus simpatizantes para terminar de confeccionar su programa electoral. En ella, se someterán a votación hasta 1.000 medidas, pero no de forma individual, sino agrupadas en propuestas de programas, como el que presentará la propia dirección nacional.

Así lo ha confirmado la secretaria de Análisis Político y Social, Carolina Bescansa, durante la rueda de prensa que ha ofrecido tras el Consejo de Coordinación del partido, que este lunes se ha centrado en concretar el calendario y el modo de terminar de elaborar su programa para las elecciones generales del 20 de diciembre.

Podemos puso en marcha en junio el proceso de para recabar las propuestas de sus simpatizantes, de la sociedad civil y de sus agrupaciones territoriales. De las miles que llegaron, son entre 800 y 1.000 las que finalmente serán sometidas a votación a mediados de octubre, y entre 400 y 500 las que compondrán finalmente el programa.

No obstante, el sistema de votación diseñado por el equipo encargado de organizar el proceso —liderado por Bescansa— no consistirá en que los simpatizantes voten estas medidas de forma individual y que sean las propuestas más votadas de cada área las que finalmente integren el programa.

En su lugar, los simpatizantes del partido morado podrán votar "programas completos", aunque sí que se habilitará la posibilidad de seleccionar propuestas de forma individual. "La gente con el aval de los círculos podrá proponer una selección de propuestas, una composición de 300, 400 o 500 medidas, con un mínimo y un máximo. Competirán programas contra programas", ha explicado.

"En el proceso final se elegirá aquel programa que la gente considere más adecuado", ha afirmado Bescansa, quien ha confirmado que el Consejo Ciudadano Estatal, con Pablo Iglesias a la cabeza, presentará una de esas propuestas de programa, que competirá con el resto.

Al igual que ya ha ocurrido en otros procesos participativos puestos en marcha por la formación —como las primarias para elegir cargos internos o la elección de los estatutos—, la dirección nacional del partido participará activamente en la votación presentando sus propias propuestas. Esta costumbre ha sido rechazada por los críticos en diversas ocasiones, al entender que reduce la pluralidad interna.

No es la primera vez que la fiabilidad del sistema de votación del partido se ha puesto en entredicho: ya ocurrió en marzo, durante el proceso de las primarias del partido para las elecciones autonómicas.

"Tenemos muchísimas propuestas. Es difícil seleccionar unas u otras. Queremos garantizar que el programa tiene ese sentido de compromiso", ha argumentado Bescansa, quien ha añadido que la intención además es que los expertos que han colaborado con Podemos en la elaboración de su programa prioricen las medidas que les parecen más adecuadas frente a otras.

Esta votación no tendrá lugar hasta segunda quincena de octubre, ya que hasta el día 11 el partido sigue recibiendo propuestas tanto de simpatizantes como de sus agrupaciones territoriales, así como de organizaciones de la sociedad civil. Tras la consulta, Podemos espera tener listo a finales de octubre su documento, que contará con una memoria económica y una calendarización de las medidas, y que según Bescansa, será "responsable".

"Llegaremos con un programa que no estará compuesto por oportunismo ni integrado con medidas improvisadas sino que representa el esfuerzo de mucha gente", ha señalado, para concretar que, entre otros objetivos, perseguirá la paralización de los desahucios, la lucha contra la corrupción, la auditoría de las deudas o la renta mínima para todo aquel que lo necesite.