Aranda de Duero es un municipio histórico e importante de Castilla y León. Se trata de la tercera localidad más poblada de la provincia de Burgos, con más de 33.000 habitantes, y con un rico patrimonio cultural y también gastronómico. No en vano, Aranda de Duero ha sido la Ciudad Europea del Vino en 2022 y es conocida también como la capital del lechazo, un manjar cárnico.
"Asentada en un subsuelo plagado de antiguas e históricas bodegas, las que daban cobijo a sus afamados vinos de la DO Ribera del Duero, Aranda de Duero conserva ese aire de villa medieval que atrapa al viajero. Porque, además de seducirle por el paladar con el lechazo asado, su plato estrella, la localidad castellana ofrece atractivos patrimoniales vinculados a su historia que proponen un emocional viaje al pasado…", según aseguran fuentes municipales del área de Turismo. Estos son 7 planes imprescindibles en Aranda de Duero:
1) La Plaza Mayor, el corazón de Aranda
La Plaza Mayor es considerada el auténtico corazón de Aranda de Duero, donde antaño se celebraban ferias y mercados. Es un lugar ideal para desconectar e ir de tiendas y bares o para sentarse y disfrutar del encanto de la plaza y del centro del municipio.
A sus edificios de la nobleza une los característicos soportales, un quiosco de música y, sobre el propio pavimento, una reproducción del plano de Aranda, el primer plano urbano en perspectiva realizado en España, que data de 1503 (el original está en Simancas, Valladolid).
Esta plaza alberga también el Centro de Interpretación de la Arquitectura del Vino (CIAVIN), en un edificio con restos del siglo XVIII. Forma parte de este Centro la Bodega de las Ánimas, que recrea diferentes escenas sobre la elaboración del vino. En la Plaza Mayor también se encuentra la Oficina de Turismo del Ayuntamiento.
2) Iglesia de Santa María la Real, templo gótico majestuoso
La Iglesia de Santa María la Real, que cuentan de ella que es tan hermosa por dentro como por fuera, es un majestuoso templo gótico del siglo XV, construido sobre una anterior iglesia románica. Destaca la espléndida portada-retablo de su fachada principal, dedicada a la Virgen María.
3) Bodegas subterráneas
Otro de los planes imprescindibles en Aranda de Duero es sumergirse en las bodegas subterráneas, un singular mundo de bodegas medievales convertidas en un laberinto de naves que recorre todo el casco histórico.
El subsuelo arandino está horadado por 7 kms de galerías excavadas entre los siglos XII y XVIII. Se encuentran a una profundidad aproximada de 10/12 metros, desde la Edad Media, para almacenar el vino de los cosecheros de la localidad. En la actualidad se conservan 135 bodegas, algunas de las cuáles pueden visitarse. Entre ellas, Las Ánimas o la de Don Carlos, una bodega medieval con visitas teatralizadas los sábados y con degustación de vino al finalizar.
4) La Calle Isilla y la Plaza del Trigo
En la Calle Isilla es donde podremos encontrar numerosos restaurantes-asadores, bodegas, vinotecas y pastelerías, que se suceden a lo largo de los 300 metros de esta bulliciosa calle peatonal. Al final enlaza con la Plaza del Trigo, que no solo luce la belleza de la arquitectura castellana del siglo XIX sino que cada año acoge los conciertos gratuitos del Festival Sonorama-Ribera, de música Indie.
5) Disfrutar de la gastronomía y el lechazo
Otro de los planes imprescindibles en Aranda de Duero es disfrutar del inigualable lechazo asado en horno de leña. El lechazo –cría del cordero lechal (que aún mama), de carne más tierna– es, asado, una auténtica delicia para el paladar. Un manjar cárnico con diferentes maneras de prepararlo. No obstante, solo una cuenta con el reconocimiento de ‘La capital del lechazo’: la que autentifica la marca ‘Lechazo Asado de Aranda de Duero’.
Uno de los asadores más reconocidos del municipio es Casa Florencio, avalado con más de 70 años apostando por el lechazo asado en horno de leña. Además del lechazo, otras delicias gastronómicas de Aranda son la morcilla, la sopa de ajo castellana, la torta de Aranda y el hojaldre de crema. Y, por supuesto, vinos de Ribera de Duero.
6) Puente románico de las Tenerías
Es un puente medieval de estilo románico sobre el río Bañuelos, afluente del Duero, ubicado junto a la iglesia de San Juan y el Barrio de las Tenerías, así llamado por sus talleres donde se curtían y trabajaban las pieles.
7) Museo de la Alfarería y Cerámica
El Museo de la Alfarería y Cerámica, muy interesante, está instalado en un edificio restaurado de dos plantas, rodeado de un patio exterior.
En una se exponen piezas de alfarería tradicional utilizadas en cocina, mesa, alcoba, transporte, almacenamiento y trabajos de campo; la otra está reservada a exposiciones vinculadas a la alfarería y a los nuevos creadores ceramistas. La planta superior acoge una exposición permanente sobre alfarería tradicional española, con piezas procedentes de Castilla y León y de otras comunidades autónomas.
Cómo llegar a Aranda de Duero:
Acceso desde Madrid:
El acceso a la localidad de Aranda de Duero se realiza desde Madrid por la autovía N-I, dirección Burgos, y se encuentra a 172 kilómetros de la capital.
Acceso desde Burgos:
El acceso a la localidad de Aranda de Duero se realiza desde Burgos por la N-I, dirección Madrid, y se encuentra a 84 kilómetros de la capital.
Acceso desde Valladolid:
El acceso a la localidad de Aranda de Duero se realiza desde Valladolid por la N-122, dirección Soria, y se encuentra a 97 kilómetros de la capital.
Acceso desde Segovia:
El acceso a la localidad de Aranda de Duero se realiza desde Segovia por la N-110 hasta que se cruza con la autovía N-I, dirección Burgos, y se encuentra a 126,5 kilómetros de la capital.
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