La polémica ha llegado a Quintanar de la Orden, en Toledo, donde el Ayuntamiento de PP y Vox ha decidido cancelar la obra de teatro Qué difícil es, que ya llevaba dos temporadas en cartel y de la que habían podido disfrutar, hasta ahora, más de 3.000 espectadores.

El espectáculo aborda asuntos como el bullying o la diversidad sexual y, por ello, al teatro han acudido a verla espectadores de todas las edades e, incluso, grupos de escolares.

Así, la compañía de teatro ha asegurado que se han enterado de la cancelación por un email recibido por parte de una concejala del Ayuntamiento, donde se les trasladan las inquietudes porque la obra "podría escandalizar al público". Ante esto, el grupo artístico argumentó que la indumentaria de los actores no tenía la menor importancia, pues no es provocativa ni protagonista en la representación. Pese a esto, la concejalía decidió cancelar la contratación.

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Este miércoles, Espejo Público ha podido hablar, en directo, con José Manuel Maciá, actor, guionista y distribuidor de la obra de teatro censurada: "Nunca, jamás, hemos recibido una sola queja ni un comentario hacia el vestuario que llevamos los actores en este espectáculo. Los calzoncillos que utilizamos son como los que usaba tu abuelo o el mío".

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Además, el intérprete ha apuntado que tampoco tienen "constancia de que nadie se haya sentido ofendido o, como dice esta concejala, escandalizado en los cerca de dos años actuando en el Teatro Alfil de Madrid". Asimismo, José Manuel ha agregado que "a través de la comedia se tratan temas muy delicados y candentes, a veces tabú, como la diversidad sexual, la depresión, el suicidio juvenil, la paternidad o el bullying o acoso escolar".

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Por su parte, desde el plató del matinal, Susanna Griso ha apuntado que el matinal había contactado con el Ayuntamiento toledano para que tanto el alcalde como la concejala ofrecieran las explicaciones pertinentes, pero "han rechazado la petición". Tras esto, el organismo habría emitido un comunicado en el que se desmentía cualquier contacto con miembros de la compañía y denuncian una "utilización partidista" del tema: "La verdad es que la obra no es del gusto del público".

Sin embargo, el actor ha sentenciado que el comunicado "es mentira" y que la concejala ha actuado "por su cuenta y riesgo, desoyendo a los profesionales de cultura del Ayuntamiento": "Es vergonzoso, es una censura, es un veto, un atentado contra la cultura que nos afecta mucho".