Desde que se aprobó la ley de la eutanasia, muchas personas enfermas han conseguido ver una salida para poner fin al sufrimiento crónico que padecen. Así, este viernes, Espejo Público ha mostrado el caso de Belén, una joven que quiso acabar con su vida.
La mujer, de 54 años, fue diagnosticada con esclerosis múltiple cuando tenía solo 20 años y, aunque se encontraba bien, todo cambió cuando contrajo el coronavirus. Fue entonces cuando Belén quedó postrada en una silla de ruedas.
El matinal de Antena 3 ha expuesto la conversación que madre e hija mantuvieron y en la que esta última pedía a su madre que dejase entrar a los sanitarios para practicarle la eutanasia. "Cierra la boca, por egoísmo no puedo estar sola, no quiero que te vayas".
Belén, por su parte, insiste a su madre en que su deseo es irse y acabar con el sufrimiento, pero su madre se niega a concederle esta petición: "Yo no puedo hacer esto, ¿qué hago cuando vea tu habitación vacía? A lo mejor mañana sale un medicamento estupendo para la esclerosis".
Tras esto, el programa ha contactado en directo con Polonia, abogada de Abogados Cristianos que ha sido contratada por la madre de Belén para llevar el caso: "Esta chica tiene esclerosis múltiple y, además, tiene una depresión, que es curable. Aunque tenga una depresión, no tiene dolores".
"Ambas admiten que el informe médico es exagerado. La depresión se trata y hay fármacos que la mitigan. Esta chica no tiene dolores ni sufrimiento. Ella, consciente de su depresión, nombró a su madre como representante legal para que decidiese. Fruto de la depresión, hoy te dice que quiere morir y mañana te dice que quiere seguir viviendo", ha apuntado la abogada.
Finalmente, Susanna Griso ha sentenciado que "no es solo una depresión, es una esclerosis múltiple sufrida durante 30 años y ahora está en una silla de ruedas. Entiendo que un comité médico y ético tendrá la capacidad de evaluarla".
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