Pese a que ya no ocupe la mayoría de los titulares y parezca que muchos medios de comunicación se han olvidado de ello, la guerra entre Ucrania y Rusia sigue activa y, por tanto, la ayuda humanitaria no ha dejado de ser imprescindible.

Este jueves, Espejo público ha entrevistado en directo a Manolo Jiménez, un cocinero que decidió trasladarse a Kiev. "No teníamos mucha seguridad de que la ayuda llegaba donde tenía que llegar", ha comentado el chef que, además, ha destacado que al llegar a la capital ucraniana se dio cuenta de que sus sospechas eran infundadas.

Pese a comprobarlo con sus propios ojos, Jiménez decidió quedarse en Kiev para trabajar como cocinero en un restaurante. Manolo ha comentado que, pese a la invasión, los ucranianos están tratando de recuperar la normalidad.

Los rusos roban el grano de las zonas ocupadas y lo transportan a Crimea

El cocinero ha señalado que ha elaborado un menú español y que, además, una parte de los beneficios obtenidos tras la venta de esta comida se destina a una asociación ucraniana que busca paliar los efectos de la guerra. 

El menú cuenta con tres tapas a elegir entre pincho de tortilla, salmorejo o pisto, un primer plato que puede ser lomo al ajillo o paella de marisco y, finalmente, una torrija como postre.