'En boca de todos' narra el caso de dos clientes intoxicados en un restaurante: "Pidieron brócoli y les dieron cannabis"

El matinal ha hablado con el psiquiatra forense José Miguel Gaona.
El matinal ha hablado con el psiquiatra forense José Miguel Gaona.
MEDIASET
El matinal ha hablado con el psiquiatra forense José Miguel Gaona.

Ir a un restaurante y pedir algo de su carta implica que confiemos en que los ingredientes serán de la mejor calidad y que, además, la comida estará elaborada conforme a la ley y las normas de sanidad. Sin embargo, dos clientes de un restaurante se han visto envueltos en un caso que les ha llevado a estar ingresados en la UCI.

"Yo no sé qué pasa con la comida ni con la cocina en este país", ha comenzado Nacho Abad para, después, en su sección de investigación de En boca de todos, informar acerca del caso de dos personas que han sido intoxicadas con cannabis en un restaurante.

"Imagínense que usted va a un restaurante con unos amigos. Pide brócoli salteado con unos ajitos de la huerta, todo muy normal... Salvo por un detalle: sufre una intoxicación y acaba en la UCI. ¿Saben por qué? No era brócoli, era cannabis", ha apuntado el periodista.

Así, el policía Carlos Segarra ha destacado que él no sabría diferenciarlo porque "nunca pediría brócoli en un restaurante" y que, pese a ello, el restaurante tendrá que responder ante las autoridades por un "delito contra la salud pública".

Por su parte, el psiquiatra forense José Miguel Gaona ha explicado, entre risas: "El brócoli es de la familia del repollo y tiene una consistencia y apariencia absolutamente distintas. El cannabis, por el contrario, tiene una hoja plana. No veo cómo es posible que en la cocina se haya producido tal confusión".

Respecto a los efectos secundarios del consumo de cannabis, Gaona ha apuntado: "Ingerir cannabis por vía oral es una moda tonta de Estados Unidos de hace años. Esta moda de meterlo en galletas, brownies... es bastante más peligrosa de lo que parece. Las personas que fuman cannabis, si se encuentran mal, intoxicadas, pueden parar inmediatamente su administración. Pero por vía oral se sigue absorbiendo y pasada una hora o dos ya no sirve para nada provocar el vómito. Te tienes que tragar los efectos secundarios, que son tremendamente desagradables: bradicardias, sudores fríos, náuseas, mareos... Es decir, la intoxicación es bastante grave".

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