Alimentación y menopausia: "Debemos potenciar las proteínas y aprovechar la experiencia nutricional adquirida"

En la actualidad las mujeres llegan a esta etapa con mayor energía porque existe una mayor concienciación con el cuidado físico y emocional. Los expertos recomiendan verla como una ‘edad de oro’ e impulsar factores que toda mujer puede manejar, como la alimentación, el ejercicio y los pensamientos positivos.
La actividad física mejora el estado de salud de las mujeres durante la menopausia.
La actividad física y la alimentación mejora el estado de salud de las mujeres durante la menopausia.
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La actividad física mejora el estado de salud de las mujeres durante la menopausia.

La menopausia es una época de cambios. Aparecen síntomas físicos como los sofocos, la fragilidad del cabello o las sequedad vaginal y también emocionales que pueden alterar el sueño, disminuir la energía o afectar la salud emocional.

Por ello, los expertos recomiendan cuidar y potenciar aquellos factores que cada mujer puede manejar, como es el caso de la alimentación, el ejercicio y los pensamientos positivos “que pueden cambiar como vivimos este proceso, porque lo realmente importante es cómo interpretamos lo que nos ocurre”, indica la doctora y psicoterapeuta, Marisa Navarro, autora del libro La alimentación emocional.

La doctora asegura que en la actualidad las mujeres llegan a esta etapa con mayor energía porque existe una mayor concienciación con el cuidado físico y emocional y defiende la necesidad de ver este periodo como una ‘edad de oro’ que puede llegar a convertirse en uno de los mejores de la vida: “Nos encontramos con fuerzas y ganas, y libres de muchas responsabilidades que nos han acompañado a lo largo de nuestras vidas. Quizá con otras responsabilidades, pero también con una mochila de experiencias vitales que nos hacen pensar, sentir y actuar de forma mucho más sabia”, añade.

Debido a que en este periodo se producen muchos cambios hormonales que afectan al organismo es fundamental que la alimentación se convierta en un pilar fundamental para mitigar o prevenir sus efectos, sobre todo, los relacionados con la pérdida de masa muscular o la aparición de la osteoporosis.

“Se debe potenciar la toma de proteínas, así como tratar de realizar ejercicios de fuerza, tan sencillos como levantar unas pesas de pocos kilos y hacer unos cuantos movimientos con ellas. Esto hará que se mantenga la masa muscular”, asegura la doctora Navarro. “Es muy importante tener en cuenta que los músculos y los tendones constituyen la armadura del cuerpo humano, por lo que se necesita que esté fuerte y flexible el mayor tiempo posible, y ante la posible aparición de la osteoporosis esto se hace fundamental”.

Mayor conocimiento nutricional

La experta insiste en que en esta etapa de su vida las mujeres deben aprovechar a su favor la experiencia adquirida durante años sobre su propio cuerpo: “Llegamos a este momento con un gran conocimiento nutricional sobre nosotras mismas, sabemos lo que nos sienta bien y lo que nos sienta mal, sabemos cuáles son los alimentos saludables y cuáles no lo son, sabemos de sobra lo que tenemos que hacer para llevar una alimentación sana”, puntualiza Navarro.

En esta etapa la mujer puede tener marcados cambios en su estado de ánimo, en su humor o manifestar ansiedad y tristeza. Todo ello puede traer consigo episodios de hambre emocional que, según la especialista en nutrición, "no deben combatirse comiendo sino queriéndose a uno mismo y escogiendo alimentos sanos para tener en la despensa".

“Prepara cosas apetecibles a las que siempre puedas echar mano, palitos de zanahoria, de pepino, de apio, tomates cherry, rabanitos, fruta congelada en forma de deliciosos helados, pechugas de pollo asadas a tiritas, tortitas de legumbres, latas de berberechos, mejillones o atún al natural, así como un frutero con deliciosas manzanas, y todo lo que se te ocurra saludable y que a ti te encante. Y si te gusta cocinar, en Internet se encuentran cientos de recetas saludables, deliciosas y bajas en calorías”, recomienda Marisa.

La doctora recuerda que no se deben dejar de lado los hidratos de carbono en la alimentación, al ser muy necesarios, priorizando el consumo de legumbres y frutos secos. Asimismo, y fuera de la alimentación, Marisa Navarro matiza que juegan un papel primordial los pensamientos positivos, y mantener una vida sexual activa, que ayuda enormemente a mejorar la sequedad vaginal.

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