Muchas de las mujeres que pasan la menopausia en España carecen de la mínima información sobre ello. Los síntomas más comunes son los sofocos, el insomnio, los sudores nocturnos, el aumento de peso. Todo esto tiene que ver con que disminuye el nivel de estrógenos.
Es por eso que muchas de las mujeres que están pasando por este proceso, deciden llevar a cabo un tratamiento hormonal para aumentar la producción de estrógenos.
Según Amani Meaidi, médica investigadora postdoctoral, Vigilancia del Cáncer y Farmacoepidemiología, "a medida que aumenta la demanda y se facilita el acceso a la terapia estrogénica vaginal para el síndrome genitourinario de la menopausia, es vital seguir investigando sobre su seguridad".
¿Qué es el síndrome genitourinario y cómo se trata?
El síndrome genitourinario de la menopausia o SGM está constituido por síntomas como dolor durante el coito y hemorragia postcoital, irritación y picor vaginal, e infecciones del tracto urinario e incontinencia. El SGM es causado por la atrofia urogenital que desarrollan las mujeres debido a la disminución de los niveles de estrógenos durante la menopausia.
De esta manera, múltiples pacientes optan por la terapia estrogénica vaginal para acabar con estos síntomas. Se administra localmente en forma de comprimidos, anillos o geles de estrógenos que se colocan en la vagina, donde sustituyen a los estrógenos que faltan y favorecen el engrosamiento y la lubricación del revestimiento interno de la vagina y la vejiga.
Tal y como afirma la doctora, el uso de estrógenos tomados por vía oral en dosis mucho más altas para los sofocos y los sudores nocturnos de la menopausia, ha disminuido en las dos últimas décadas con el reconocimiento de sus graves efectos adversos.
Por otro lado, el uso de estrógenos vaginales está aumentando, lo que representa una necesidad abrumadora en nuestra población que envejece, pero también sugiere que la gente se siente cómoda con su uso. ¿Pero realmente es segura la terapia estrógenica vaginal?
¿Qué pasa si tomo estrógenos durante la menopausia?
Un estudio publicado en el The Lancet Journal, demostró que la terapia hormonal sistémica se ha asociado a un mayor riesgo de cáncer de mama.
En lo que respecta a la terapia estrogénica vaginal, existen menos estudios sobre ello, no han podido examinar la influencia de la duración y la dosis de estrógenos vaginales en el riesgo de desarrollar cáncer de mama.
Según la investigadora Amani Meaidi, esto supone una grave laguna de conocimiento, ya que el perfil de riesgo de un fármaco a menudo depende tanto de la duración como de la dosis.
Así es que la doctora llevó a cabo un estudio para comprobar estos datos, y descubrió que "no hay ninguna asociación entre el uso de estrógenos vaginales y el cáncer de mama, ni siquiera en mujeres posmenopáusicas que habían utilizado el tratamiento durante más de nueve años o en usuarias de dosis altas a largo plazo".
Riesgos de la terapia hormonal con estrógenos
Aunque la médico aseguró que no hay riesgo a padecer cáncer de mama, insiste en el aumento de las investigaciones sobre otras enfermedades: "el perfil de riesgo completo del estrógeno vaginal aún está por descubrir", añade.
Por ejemplo, el riesgo para los órganos cercanos sigue siendo incierto. Los estudios han sugerido un mayor riesgo de cáncer de útero con el uso de estrógenos vaginales, pero los resultados aún no se han establecido.
Debido a la mayor facilidad de acceso a la terapia estrogénica vaginal y del aumento de su uso y demanda, "es importante presionar para que se realicen más investigaciones sobre su seguridad".
¿Quieres recibir gratis todos los jueves en tu correo los mejores contenidos de belleza, moda y estilo de vida? Apúntate a nuestra Newsletter.
Comentarios