Ninguno de los dos había nacido cuando Luis García Berlanga retrató con su satírica mirada a la alta sociedad española durante el franquismo en una mítica película que sigue siendo objeto de culto. Mucho ha cambiado el mundo desde entonces y la sociedad española, para mejor por supuesto hasta despertar con una sonrisa por el primer oro que se resistía. España estrenó el dorado de su medallero gracias a la mirada detrás de las escopetas de Fátima Gálvez y Alberto Fernández, que estrenaron la nueva modalidad del trap mixto por todo lo alto.

Fátima Gálvez y Alberto Fernández, la pareja de tiro triunfadora en Tokio a la que hace años se trató como 'delincuentes' en Abu Dabi

Ángel García, compañero de Cope, prepara con mimo los Juegos. Sus fichas de cada deporte y de cada deportista español deberían ser objeto de lectura obligatoria para entender esas modalidades en las que solo reparamos cada cuatro años –casi siempre en caso de éxito- y las curiosidades de sus protagonistas. 

Gracias a eso sabemos que Fátima Gálvez expresó su anhelo de ser olímpica por primera vez viendo la tele en Barcelona 92. Desde muy niña demostró su gran personalidad cuando acompañaba a Don Pío, su padre, a cazar: “En vez de coger perdices y conejos, ¿por qué no me dejas pegar un tiro?” le espetó. Su tesón, su disciplina y su inquebrantable fe, costalera y devota de la Virgen de Fátima, hicieron el resto hasta tocar el cielo en su tercera participación olímpica.

La felicitación más especial a Alberto Fernández por su oro olímpico en Tokio: Rafa, guitarrista de 'Hombres G'

Alberto Fernández pasó de “matar” dinosaurios de juguete a empezar a disparar con solo ocho años. No tardaría demasiado en empezar su devoción por los Hombres G, a los que hoy sigue rindiendo culto a través de su otra gran pasión, la música. Su mujer Beatriz, también tiradora, revela una de las motivaciones para tener tanta precisión: “Cada vez que falla un plato, tiene que fregar platos en casa durante una semana.”

Ojalá este primer oro tenga un efecto llamada para el resto de deportistas españoles. De momento, permite un buen salto para nuestro deporte en el medallero de estos peculiares y extraños Juegos de la pandemia.