El Senado ha vetado este martes la proposición de ley de amnistía gracias a la mayoría absoluta del PP en la Cámara y al apoyo de Vox, UPN y la Agrupación Herreña Independiente. 149 votos a favor, 113 en contra. La norma volverá ahora al Congreso de los Diputados, que previsiblemente levantará el veto este 30 de mayo, dando así luz verde a la medida de gracia. La amnistía, según ha expresado la portavoz del PP en la Cámara Alta, Alicia García, no atiende "a ningún bien común, sino a la ambición desmedida de un presidente que haría lo que fuera por seguir habitando la Moncloa".
Durante el debate previo a la votación -que se ha realizado por llamamiento-, García se ha encargado de denunciar esta ley "obscena, la peor en 45 años de democracia", y la ha calificado de "fraude democrático". Lejos de ver en ella el acto de "reconciliación" que han defendido el PSOE y sus socios, el PP equipara la amnistía a una "operación mercantil entre políticos". "Profunda corrupción política", ha resumido la senadora popular.
El Grupo Parlamentario Socialista, en boca del senador José María Oleaga, ha instado al PP a adquirir "perspectiva". En su día, el PP se opuso a leyes como la del aborto, el matrimonio igualitario o la eutanasia, ha explicado Oleaga antes de preguntar a la bancada popular: "Con el paso del tiempo, ¿con quién están más de acuerdo?¿Con sus dirigentes de entonces o con el Partido Socialista?".
A lo largo de 10 minutos en los que ha predominado un tono cortante, Alicia García ha incidido en el cambio de opinión del Ejecutivo de Pedro Sánchez respecto a la medida de gracia. "Por arte de magia, lo que antes del 23 de julio era inconstitucional ahora es un acto impecable por el cual se felicitan a sí mismos", ha recriminado a la bancada socialista. García también ha enfrentado la amnistía en trámite a la aprobada en 1977. Si aquella ley "ayudó modélicamente a pasar a una democracia", la que está a punto de aprobarse supondrá "la ruptura del Estado de derecho y la quiebra de la igualdad entre españoles".
Por otro lado, el PP ha criticado también el procedimiento que ha seguido la amnistía. La formación viene manifestando desde hace meses que esta norma no debió tramitarse como proyecto de ley, dado que los letrados del Senado advirtieron de que supone "una reforma encubierta de la Constitución". Proponer reformar la Constitución habría sido la vía "correcta", pero los impulsores de la amnistía se la "han hurtado" al Senado y a todos los españoles.
Más aún, ha denunciado la senadora, el Congreso impulsó la vía de urgencia en contra de lo que después recomendó la Comisión de Venecia. Y además se ha ido modificando por el camino según las reclamaciones de los socios del Partido Socialista. "Ustedes cocinaron con espesa oscuridad las enmiendas que beneficiaban a sus socios. Es una ley de amnistía redactada por el abogado de su principal beneficiario, ¡lo nunca visto!", ha indicado García en referencia a Gonzalo Boye, letrado de Carles Puigdemont que participó en las negociaciones de la norma.
El PSOE pide "perspectiva"
"La política exige mirada larga, exige la perspectiva del tiempo", ha arrancado el senador socialista José María Oleaga. Sobre esta premisa ha construido el grueso de su intervención, que como la de Alicia García ha arrancado con alusiones a la amnistía de 1977. Tras las alabanzas de la senadora popular a aquella norma, Oleaga ha recordado que "Alianza Popular no la apoyó en su día".
A partir de ahí, Olega ha ido repasando toda una serie de normas que impulsó el PSOE y el PP rechazó. Se ha referido a la Constitución de 1978 y a Manuel Fraga, al divorcio y a Francisco Álvarez Cascos, a la ley del aborto y a Alberto Ruiz Gallardón, al matrimonio igualitario y a Mariano Rajoy... Y tras denunciar la oposición del PP a todas estas normas ha repetido sistemáticamente la pregunta: ¿Con quién se identifica el PP actual, con el PP de entonces o con el PSOE?
Todo para concluir que la ley de amnistía es "buena para el país", que "España no se rompe" y que el PP debería "ser leal a su país" y apoyar la medida de gracia. Acto seguido, ha subido a tribuna el popular Antonio Silván, que ha ironizado con que el PSOE le reproche a su partido "los cambios de opinión". Así ha culminado el debate, con los reproches al PSOE por una amnistía "que no es de convivencia, sino de conveniencia", y que se ha tramitado "por la puerta de atrás".
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