OPINIÓN

La pausa dramática sin un ápice de fuerza, ni en sus emociones: el análisis no verbal del discurso de Sánchez en Moncloa

Así ha sido el discurso entero de Pedro Sánchez donde ha anunciado que sigue como presidente
Así ha sido el discurso entero de Pedro Sánchez donde ha anunciado que sigue como presidente
Así ha sido el discurso entero de Pedro Sánchez donde ha anunciado que sigue como presidente
Así ha sido el discurso entero de Pedro Sánchez donde ha anunciado que sigue como presidente

La impertérrita sonrisa de Pedro Sánchez ha desaparecido en el día de hoy. Comparece ante los medios con una actitud que podemos describir visiblemente como: seria y triste. Son los adjetivos que mejor pueden ilustrar su estado emocional, a pesar de que no ha dimitido y finalmente asegura: "He decidido seguir, con más fuerza".

Y aquí es donde se aprecia la incongruencia. Con las manos sujetas entre sí, apretadas, contenido, manifiesta un discurso verbal poético para dar todas las razones por las que ya 'no merece la pena' continuar en su puesto. Su tono es lento y profundo, sus cejas trianguladas muestran que se encuentra afligido. Por tanto, todo hacía parecer que el desenlace de este discurso iba a ser su dimisión.

De repente, hay una pausa dramática y acaba anunciando que, tras estos días de reflexión personal, va a continuar con más fuerza, precisamente sin un ápice de fuerza, ni en sus emociones, actitud, tono de voz o gestualidad.

¿Qué te parece la decisión que ha tomado Sánchez de seguir como presidente?

Es importante también destacar lo que no se ve, no se aprecia enfado, rabia o ira, solo se proyecta apesadumbrado y continúa con esa amarga aflicción para manifestar que va a continuar pero no sale de ahí, de ese estado emocional, no hay alegría, ni esperanza, ni firmeza, ni energía. Exhibe debilidad y afectación a pesar de sus palabras.

Por último, su posición verbal y no verbal es a las claras victimista, a pesar de su determinación al dar continuidad a su legislatura, él mismo se define así, la víctima de mentiras groseras, del escarnio público y la persecución de una sociedad enfangada y tóxica. (Palabras suyas todas)

Este indicador también se valida por el recurso evasivo en su forma de abordar su situación particular. Habla de mujeres que tienen que renunciar por las carreras de sus maridos, en general, sin poner el foco en la individualidad, sino que utiliza la estrategia de la generalización, como si el caso de la pareja fuera frecuente y extendido y formaran parte de un todo mayor.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento