Las reuniones continúan sucediéndose para concretar las condiciones de liberación de presos palestinos y rehenes israelíes, tal y como se acordó el pasado febrero en París. De acuerdo con las últimas informaciones tras un nuevo encuentro de mediadores en Doha, Israel podría haber suavizado su postura y podría llegar a liberar hasta a 800 presos palestinos, el doble de los 400 que se anunció en un primer momento, según ha indicado un funcionario israelí a The Times of Israel: "Nos sentimos 50/50 acerca de las posibilidades de llegar a un acuerdo".
Tras las últimas conversaciones, las autoridades del Gobierno de Netanyahu habrían aceptado una propuesta de compromiso puesto sobre la mesa por EEUU. El contenido de esta no se conoce, pero según la fuente citada los informes sugieren que Jerusalén estaría dispuesta a duplicar el número de reclusos liberado a cambio de 40 rehenes (mujeres, niños, enfermos y anciano) en la primera de las seis fases propuestas para esta resolución.
De acuerdo con un informe difundido por el canal de noticias israelí Khesset 12, de los casi mil presos que Israel estaría dispuesto a liberar, en torno a un centenar serían condenados por asesinato. De acuerdo con otro documento publicado por el canal de televisión Al Jazeera, las autoridades hebreas habrían ofrecido cinco prisioneros por cada mujer soldado liberada.
Otra exigencia de Hamás es el retorno de miles de gazatíes desplazados al norte de la Franja, a lo que Israel habría accedido a permitir el regreso de unos 2.000 habitantes por día, comenzando dos semanas desde la entrada en vigor del acuerdo de tregua.
A pesar de estas propuestas, Israel "se niega a acordar un alto el fuego general y niega la retirada de sus fuerzas de Gaza", según indicó Hamás a AFP. Ante esta situación, se espera que el grupo radical no ofrezca una respuesta hasta dentro de varios días debido a la dificultad de comunicación del líder de Hamás, Yahya Sinwar, quien se cree que estaría escondido bajo tierra.
Tras estas informaciones, un acuerdo parece estar cada vez más cerca. Sin embargo, otro funcionario israelí ha rebajado el optimismo ante la posibilidad de avance, asegurando que el principal punto discordante para llegar a posiciones comunes es el número de prisioneros de alto valor que liberaría Israel.
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