El Banco Central Europeo tiene previsto acometer las bajadas de los tipos de interés en los próximos meses, y muchos bancos ya se han adelantado abaratando su oferta hipotecaria que, a ojos de los expertos, puede suponer una mejora en las condiciones de los préstamos tras este período de congelación de las hipotecas.

Gonzalo Bernardos, economista, consultor y director del Máster inmobiliario de la Universidad de Barcelona,  cree que los bancos "van a tener que aumentar su base de créditos y ahora tienen una confianza que no tenían el año pasado. Van a levantar el freno de mano y va a haber guerra hipotecaria". 

Ofertas al 2% a finales de año

Sus previsiones apuntan a que las entidades irán abaratando cada vez más el interés de sus hipotecas fijas y que a final de año pueden volver las ofertas "al 2%, incluso al 1,8% para los clientes que tengan buenos perfiles".

De hecho, existen ya varios préstamos para la compra de vivienda a tipo fijo que se mueven por debajo del 3% a un plazo de 30 años, como por ejemplo los que ofrecen BBVA, Evo Banco, Banco Sabadell o Ibercaja, según explican en Idealista. Aunque la lista irá creciendo con el paso de los meses, y a medida que se vaya abaratando el precio del dinero.

El economista espera también que la banca se muestre más proclive a conceder hipotecas por encima del 80%, siempre que los consumidores tengan capacidad de pago. "En los próximos meses podríamos hipotecas al 85%,90% o 95%. Aunque serán selectivas, ayudarán a muchas familias a acceder a una vivienda".

Subirá la demanda y el precio de la vivienda

Bernardos, en su informe, estima que crecerán las compraventas a un ritmo de dos dígitos este año (cerca del 15%) hasta situarse cerca de 650.000 - 660.000 frente a las 640.000 de 2023. "La primavera de 2024 marcará un punto de inflexión al calor de la recuperación de la economía, unos tipos de interés más bajos y un sector financiero más flexible en la concesión del crédito". 

En este sentido, Bernardos asegura que la financiación será la clave para que las compraventas de vivienda usada marquen un nuevo récord, superando las cifras de 2022. 

En cuanto a los precios, el profesor de Economía estima que podría producirse un incremento de entre el 5% y el 7% que, como viene sucediendo en los últimos años, será más patente en las grandes ciudades y sus áreas metropolitanas, sobre todo en Madrid y la costa mediterránea. "Donde haya más oferta, menos va a subir la vivienda. Y donde haya menos oferta, más va a subir", ha recalcado Bernardos.