En Londres sintieron este jueves un estremecimiento al ver las noticias que llegaban de España. La imágenes del edificio de Valencia ardiendo en su totalidad les recordaron a muchos lo ocurrido el 14 de junio de 2017 en la Torre Grenfell, de la capital británica. Ardió durante 60 horas y 72 personas perdieron la vida.
Fue el peor incendio residencial en el Reino Unido desde los bombardeos alemanes de la Segunda Guerra Mundial y el incendio estructural más mortífero en aquel país desde 1988. El suceso marcó un antes y un después en la seguridad de la arquitectura ante el fuego y llevó a actualizar la normativa europea al respecto.
24 plantas de viviendas sociales
La Torre Grenfell era un edificio de viviendas sociales de 120 apartamentos distribuidos en 24 plantas, situado en el distrito de North Kensington, al oeste de Londres. A primera hora del 14 de junio de 2017 el inmueble comenzó a arder. El origen fue un fallo eléctrico en un frigorífico de la cuarta planta.
El revestimiento exterior del edificio era de aluminio con polietileno en su interior
El problema es que el fuego se propagó rápidamente por el exterior del edificio, por la fachada, llevando las llamas y el humo a todas las plantas. A ello contribuyó el revestimiento exterior de aluminio y con polietileno en su interior. Además, el espacio de aire entre ambos generó un efecto chimenea, lo mismo que ha sucedido en Valencia.
Responsabilidades públicas y privadas
Para intentar apagar las llamas y salvar vidas acudieron más de 250 bomberos, 70 camiones de bomberos de estaciones de toda la capital, 20 ambulancias con más de un centenar de equipos y una ambulancia aérea, además de paramédicos especializados y agentes de la Policía Metropolitana.
¿Por qué nadie asume la responsabilidad? ¿Por qué se protege a estas personas?"
El incendio de la Torre Grenfell desacreditó la gestión del edificio por parte del Consejo Municipal de Londres de Kensington y Chelsea y la TMO de Kensington y Chelsea (responsable de las viviendas). Pero también puso en entredicho la respuesta del Cuerpo de Bomberos (tardaron demasiado en avisar a los residentes para que evacuaran), la de otros organismos gubernamentales y las inspecciones de edificios. Dimitieron el presidente, el vicepresidente y el director ejecutivo del consejo municipal.
Una investigación eterna
Como ahora en Valencia muchos dedos señalaron los sistemas de seguridad contra incendios, los materiales utilizados, las empresas que instalaron, vendieron y fabricaron el revestimiento. El Parlamento encargó una revisión independiente de la normativa de construcción y seguridad contra incendios, y publicó un informe en mayo de 2018.
Cuando se publique el informe final de la investigación, la Fiscalía decidirá si se presentan cargos penales
Las conclusiones del primer informe de la investigación de lo ocurrido en la investigación de la Torre Grenfell se publicaron en octubre de 2019. Se afirmaba que el exterior del edificio no cumplía la normativa y que esa fue la razón fundamental por la que el fuego se propagó. Un segundo y definitivo informe debía haberse publicado en el otoño de 2023, pero la investigación prosigue.
Las víctimas siguen esperando
El documento final podría llegar el próximo mes de abril, casi siete años después de la tragedia. Tras su publicación, la Fiscalía de la Corona decidirá si se presentan cargos penales. "¿Por qué nadie ha asumido la responsabilidad? ¿Por qué se protege a estas personas?", le decía a la BBC en enero Bedriya Jemal Kelbeto, que perdió en el incendio a su hermana Nura, al marido de ésta y a sus tres hijos.
El año pasado, un grupo de 22 organizaciones, entre ellas la empresa de revestimientos Arconic, Whirlpool y varios organismos gubernamentales, llegaron a un acuerdo civil con 900 personas afectadas por el incendio.
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