Por tercer año consecutivo, el movimiento feminista marchará este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, en dos direcciones. Las feministas volverán a tomar las calles de Madrid desde la furia compartida de exigir la igualdad entre hombres y mujeres, pero con reivindicaciones distintas. Por un lado, estarán las defensoras de la ley trans. Por otro, las abolicionistas y críticas con la norma que reconoció la libre autodeterminación de género desde los 16 años.
La hora de convocatoria, eso sí, será la misma para ambas manifestaciones: las 19.00 horas del 8-M. El Movimiento Feminista de Madrid, representante de las bautizadas ya como "feministas clásicas" —las abolicionistas de la prostitución y contrarias a la ley trans—, partirá de Cibeles y terminará en Plaza de España. Por su parte, la Comisión 8M, que es la convocante de la marcha que suele ser más multitudinaria, se manifestará con un recorrido que irá entre Atocha y la Plaza de Colón bajo el lema 'Patriarcado, Genocidios, Privilegios #SeAcabó'.
"Este año recuperamos el recorrido del año 2022, porque nos parece fundamental por una cuestión política", explica a 20minutos una portavoz de la Comisión 8M. El recorrido, detalla, responde a una protesta contra la guerra en Gaza, y por ello pasará por una serie de sedes que recibirán alguna que otra insignia de las feministas: la Casa de América, el Cuartel General del Ejército, la Fundación BBVA, la Cámara de Comercio o el Banco Santander son alguno de ellos.
Con todo, la reivindicación vertebradora de esta marcha que el año pasado movilizó a 17.000 personas, según la Delegación del Gobierno, se centrará, sobre todo, en todas las violencias machistas que sufren las mujeres. La violencia de género, por ejemplo, tras un 2023 negro que dejó a 53 asesinadas en manos de sus parejas o exparejas. También reivindicarán la necesidad de desplegar protocolos contra el acoso, tanto sexual como laboral, después de los escándalos destapados con el caso de la futbolista de la selección femenina, Jenni Hermoso, o las acusaciones al director de cine Carlos Vermut. "Queremos también que se invierta en medidas de protección y de prevención en todas las fases de la vida", inciden desde la Comisión 8M.
La marcha abolicionista
En otra dirección marchará la manifestación convocada por el Movimiento Feminista de Madrid, que sale este año a las calles con el lema 'La prostitución no es un trabajo. ¡Abolición ya!'. La organización hará este año ocho reivindicaciones principales, definidas en su manifiesto: denuncia al genocidio israelí contra palestina; exigencia de políticas contra la brecha laboral; rechazo a la "cultura de la violación" y reivindicación del abolicionismo; defensa de la sanidad pública y los servicios sociales; contra la "explotación reproductiva y el mercado de óvulos"; contra el "borrado de las mujeres" y la "idea reaccionaria del cuerpo equivocado; por la coeducación y el reconocimiento cultural de las mujeres; y contra la violencia machista y la "justicia patriarcal".
En un comunicado, la organización que el año pasado movilizó a 10.000 personas defiende su convocatoria para luchar "por los derechos de las mujeres y las niñas" y defender "las reivindicaciones políticas del feminismo" que, consideran, "se han visto usurpadas y sustituidas por políticas neoliberales opuestas a los pilares del feminismo y los derechos de las mujeres".
Sea como fuere, las calles se volverán a llenar este viernes del grito de las feministas, apenas semanas después de la primera sentencia dictada en base a la ley del 'solo sí es sí' a un personaje mediático, el exfutbolista Dani Alves. El año pasado la Delegación del Gobierno cifró en 27.000 las mujeres que participaron en ambas marchas, lejos de los datos registrados en 2018 y 2019, con unas 300.000 mujeres en marchas unitarias en la capital; y de las 120.000 asistentes de 2020, justo antes de la declaración del estado de alarma por la pandemia.
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