Los masáis son un pueblo seminómada de pastores conocido por su vestimenta colorida, sus tradiciones ancestrales y una profunda conexión con la naturaleza, que habitan las vastas sabanas de Kenia y de Tanzania. Su nombre significa 'gente que habla maa', su idioma nativo, y su población se estima en alrededor de 850.000 personas distribuidas en cinco clanes diferentes, que se enfrentan a diversos desafíos en el mundo actual.
Étnicamente están relacionados con los pueblos de Sudán, de los que descienden y se separaron tras migrar hacia el este de África hace siglos. Su estilo de vida gira alrededor del pastoreo de ganado, que consideran un símbolo de riqueza y de estatus.
Cultura y sociedad de los masáis
La cultura masái está irrevocablemente ligada a sus tradiciones. Viven en aldeas circulares que reciben el nombre de 'manyattas', cuyas chozas están formadas por barro y paja. Poseen una organizadísima estructura social, basada en grupos de edad y donde cada individuo tiene un rol específico dentro de la comunidad. Los ritos y ceremonias de iniciación entre las diferentes etapas vitales marcan el calendario de los masái.
Situación actual de los masáis
La expansión de la agricultura y la expropiación de sus territorios para ampliar núcleos urbanos están amenazando sus tierras. Además, la crisis climática afecta especialmente a este tipo de etnias que continúan basando su economía en la disponibilidad de agua y pastos para el ganado.
A pesar de las promesas incumplidas de priorizar los intereses masái por parte de los gobiernos locales, se han visto obligados a participar en la economía monetaria vendiendo sus animales y su medicina tradicional para sobrevivir. Este arrinconamiento ha provocado que muchos no tuvieran otra opción que integrarse en la sociedad moderna y abandonar sus estilos de vida tradicionales, lo que sigue generando tensiones en la comunidad.
Curiosidades en la vida masái
Uno de los conflictos más destacados que ha colocado a los masái en el centro de la atención internacional es la práctica de la ablación y circuncisión, también conocida como mutilación genital femenina y masculina, respectivamente. Aunque en 2011 Kenia aprobó una ley para prohibir la mutilación genital femenina, este asunto sigue lejos de resolverse por completo.
De hecho, en el año 2021, el Tribunal Superior de Kenia rechazó la despenalización de la mutilación genital, como respuesta a una demanda que argumentaba que la prohibición era inconstitucional.
Por otro lado, los masái basan su dieta en alimentos como leche, sangre y carne de vaca y cabra. La práctica de la poligamia es común y está aceptada en el seno de las tribus; las mujeres desempeñan un papel fundamental en la crianza de los hijos, la gestión del hogar y el cuidado de los animales. No obstante, la sociedad masái se considera patriarcal.
En cuanto a su vestimenta, los masái se distinguen por sus coloridas mantas a cuadros, conocidas como 'shukas', que visten con orgullo. Además, las mujeres elaboran joyas de metal y cuentas de forma meticulosa tanto para ellas como para ellos, con fuerte valor simbólico para su identidad y estatus dentro de la comunidad. Diversos proyectos africanos están ayudando a estas mujeres a vender parte de su bisutería para hacerlas más autosuficientes y colaborar en su comunidad.
Las ceremonias de iniciación
Desde el 2018, tres de los ritos o ceremonias de iniciación del pueblo masái se encuentran recogidos en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Se trata de los ritos 'enkipaata', 'eunoto' y 'olngesherr'. Estos rituales enseñan valores como el respeto, la responsabilidad y la transmisión de conocimientos sobre la cría de ganado y tradiciones ancestrales. Los ritos son realizados por hombres jóvenes de entre 15 y 30 años, aunque las mujeres también participan ejecutando algunas labores. A través de estas ceremonias, se instruye a los jóvenes sobre su posición social en la comunidad masái.
No obstante, estas tradiciones están disminuyendo debido al cambio hacia la agricultura como principal fuente de ingresos y los desafíos del cambio climático en la supervivencia del ganado.
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