Un nuevo turista ha llegado A Coruña. Se trata de un lobo marino, que se ha dejado ver esta semana en el muelle de Oza. Es una hembra de tamaño grande que necesita "tranquilidad y respeto", además de que puede ser peligrosa "si se siente acorralada". Así lo ha comunicado la Coordinadora para el Estudio de los Mamíferos Marinos (CEMMA).
Este ejemplar fue localizado en el municipio lucense de Burela el pasado 30 de diciembre. Desde entonces, se ha avistado en diferentes puntos de la costa de A Coruña: en Ares, Oleiros y en la ciudad herculina. La CEMMA ha notificado a la Policía Local, Guardia Civil y Autoridad Portuaria sobre esta situación y así "evitar molestias".
Así son los ejemplares que llegan a Galicia
Este lobo marino es una hembra "posiblemente adulta y no un cachorro juvenil, como es habitual, en años anteriores, durante la temporada de lobos marinos". Precisa "sobre todo tranquilidad y respeto". "No debemos acercarnos pues puede ser peligrosa si se siente acorralada", ha alertado CEMMA.
Los lobos marinos que llegan a las costas gallegas son cenicientos juveniles —Halichoerus grypus—. Normalmente, tiene menos de tres meses de edad. A pesar de que nacen en colonias de Irlanda, llegan a la comunidad en etapa de dispersión para buscar áreas de alimentación sin competencia de otros ejemplares, según apunta la coordinadora.
Temporada de lobos marinos
La temporada de lobos marinos en Galicia abarca desde finales de año hasta el mes de marzo. En las últimas semanas, fue registrada la presencia de dos de ellos varados muertos: uno en Muros y otro en Mañón. Además, se localizó uno vivo en Burela.
Estos animales no solo se divisan en las costas gallegas. En el norte cantábrico y en Portugal se observaron simultáneamente varios ejemplares, "aunque en general menos que en años anteriores", ha explicado la coordinadora.
Qué hay que hacer si aparece una especie de este tipo
Estas especies marinas llegan a las costas gallegas agotadas y buscan descanso en las playas. En el caso de toparse con este animal, hay que seguir una serie de recomendaciones. Lo más importante es mantener las distancias, ya que los lobos marinos suelen responder con mordiscos. Además, hay que evitar bloquear el camino hacia el agua.
Otra de las recomendaciones a seguir es evitar hacer ruidos, ya que pueden poner nervioso al animal. Y es fundamental llamar al 112 para notificar de la presencia del animal de inmediato y mantener la confidencialidad: no se debe decir la posición de los lobos marinos a otras personas para evitar que le molesten.
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