No está siendo un buen inicio de año para Bertín Osborne. El artista, que acaba declarar públicamente que no va a ejercer como padre del hijo que ha tenido Gabriela Guillén, ha perdido recientemente a un gran amigo, Arévalo.
Sin embargo, no pudo despedirse de él por una causa de fuerza mayor, el COVID. Esa enfermedad le lleva ahora a cancelar su próximo concierto, que iba a tener lugar este lunes día 8 en Alicante.
Según ha informado Fiesta, el programa que presenta Emma García en Telecinco, el cantante se está recuperando actualmente del COVID que ha sufrido.
Según han explicado, haciéndose eco de un comunicado de su agencia de representación, aunque Osborne ya no está afectado por la enfermedad, sí está sufriendo todavía sus consecuencias, por lo que, pese a que pretendía seguir adelante con sus compromisos profesionales, de momento sí tiene que cancelar este show. Un concierto que, en su día, ya había tenido que ser aplazado el pasado noviembre.
Los pasos de Gabriela
Según ha publicado la revista Semana, Guillén prevé registrar al niño con sus dos apellidos, desvinculándolo así de su padre, Bertín Osborne, con quien no tiene intención de volver.
El cantante, por su parte, ha asegurado esta semana en una entrevista exclusiva a ¡Hola! que no tiene ninguna intención de ejercer de padre, y ha confirmado que se hará la prueba de paternidad. "Si se confirma que es mío, ayudaré", ha manifestado.
La joven no impedirá que el cantante y presentador pueda conocer al hijo que tienen en común, si bien no va a aceptar ningún tipo de dinero por su parte. Si la prueba de ADN confirma que, efectivamente, es hijo de Osborne, un juez establecerá la pensión que este deberá pasar al menor.
Asimismo, Osborne ha revelado que Gabriela Guillén "ha rechazado" cualquier ayuda que él le ha ofrecido. "Es muy injusto que la acusen de tener un interés", ha añadido, en defensa de ella.
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