Sumar rechaza limitar sus propuestas de reforma de la Constitución para que salga adelante la modificación del artículo 49, con el fin de retirar el término "disminuidos" para referirse a las personas con discapacidad en la Carta Magna. La formación que lidera Yolanda Díaz se opuso este viernes taxativamente a esa exigencia, una de las que trasladó el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, al presidente Pedro Sánchez durante la reunión que ambos dirigentes mantuvieron en el Congreso de los Diputados.
Fuentes del PP confirmaron a primera hora de la mañana que Feijó quería, en su reunión con Sánchez, "testar la capacidad de mando del presidente para someter a Sumar a los acuerdos alcanzados para reformar el artículo 49 de la Constitución". "Si Yolanda Díaz da garantías de que la modificación constitucional se circunscribirá a este asunto y no la utiliza para otros fines, hoy se puede cerrar el acuerdo", sostenían estas fuentes, que insistieron en que, "a través del trámite de urgencia y aprobando la reforma con lectura única, esta modificación podría estar vigente en el mes de enero".
En otras palabras: el PP busca que, a cambio de obtener su necesario voto a favor para retirar el término "disminuidos" de la Constitución, Sumar se comprometa a desterrar de sus propuestas cualquier otro cambio. Pero, para Díaz y los suyos, esta condición no es más que una "excusa" de Feijóo para evitar abrir el melón constitucional. "Lo que pedimos al PP es que no busque más excusas para aprobar una reforma que tiene un consenso absoluto de la sociedad y que las personas con discapacidad llevan décadas reclamando", responden fuentes de Sumar.
"Feijóo está paralizado por las críticas de la extrema derecha y cada vez son más indistinguibles, pero nosotros queremos insistir en que la política debe ofrecer soluciones y no crear problemas artificiales", denuncia Sumar. La propia vicepresidenta Yolanda Díaz criticó las condiciones impuestas por el PP asegurando que "la reforma del artículo 49 de la Constitución nos hará un país mejor y debería contar con el apoyo de todas las formaciones políticas", y exigiendo a Feijóo que deje de decir "mentiras".
Uno de los grandes miedos del PP es que la reforma constitucional, aunque inicialmente se circunscriba tan solo a una pequeña modificación en el artículo 49, termine derivando en un debate sobre cambios de mayor profundidad. Sumar, además, tendría fácil forzar la convocatoria de un referéndum para que la ciudadanía ratificara cualquier cambio, puesto que sus 26 diputados en el Congreso tan solo necesitarían el apoyo de otros nueve (los cinco de Podemos y otros cuatro nacionalistas, por ejemplo) para alcanzar la cifra de 35 parlamentarios, la cantidad mínima que puede obligar si así lo solicita a que la modificación se someta a las urnas.
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