El invierno es una época del año en la que la gente suele reunirse con sus seres queridos ya que la Navidad se engloba en ella. Miles de personas aprovechan para cogerse unos días de vacaciones y disfrutar así de estas fechas con los suyos, además de visitar lugares nuevos.
El turismo nacional suele ser una de las opciones más populares entre la población española a la hora de viajar en invierno. Unos optan por buscar zonas donde reinen las altas temperaturas para guardar durante unos días los abrigos, guantes y gorros característicos de esta temporada, pero otros se enfundan en capas dobles de ropa para irse a esquiar a las montañas nevadas.
Para aquellos que busquen un buen clima, Alicante es uno de los destinos más acertados. Aunque la localidad invite más a visitarla en verano para poder ir a la playa y tomar el sol, también ofrece una amplia variedad de planes para realizar en invierno.
Jijona, el principal productor del turrón en España
La provincia alicantina no solo cuenta con pueblos costeros, sino que también se forma por pueblos de interior. Jijona es uno de ellos, y es un candidato estrella para conocer durante la época invernal.
Se le conoce como la 'cuna del turrón' y es que este es municipio es popular desde hace décadas por la elaboración de este dulce que acompaña las mesas de los hogares en Navidad.
Su origen se debe a que los sistemas montañosos de Alicante estaban ligados a cultivo de almendros y la posterior recolecta de almendras, fruto con el que se elabora este alimento. Durante el siglo XX, la principal actividad de Jijona era la producción de turrones y sus inmediaciones están llenas de fábricas donde se elaboraba y se sigue haciendo este postre que se puede degustar tanto en su forma original o como ingrediente estrella de otras recetas (tartas, helados, batidos...).
Es por ello que en los años 60 se inauguró el Museo del Turrón, un lugar donde se puede conocer, a través de visitas guiadas, la comercialización del producto, procesos de elaboración y explicación de las materias primas empleadas. Además, con la entrada al museo, también se pueden visitar algunas de las fábricas tradicionales, como la de El Lobo y 1880. Otras, como la fábrica de turrones El Artesano, cuenta con visitas propias.
Qué hacer en Jijona aparte de visitar el Museo del Turrón
Aunque la atracción principal de Jijona sea el turrón, este pueblo alicantino cuenta con más oferta turística. Relacionado también con la gastronomía, se encuentra el Horno del Raval. Construido en 1562 y con referencias históricas desde 1497, este es uno de los más antiguos de la Comunidad Valenciana. A día de hoy sigue en funcionamiento para hacer pan y pastas, aunque solo en ocasiones especiales, como Navidad, o por encargo.
En cuanto a edificios históricos que ver en Jijona, destacan:
- El Castillo de Jijona, también conocido como Torre Grossa: fortaleza de origen almohade construida entre finales del siglo XII y principios del siglo XIII.
- La Iglesia de Santa María: situada en la Plaça Nova, se caracteriza por ser un templo gótico.
- La Iglesia Arciprestal de Nuestra Señora de la Asunción: templo renacentista construido a finales del siglo XVI y a principios del XVII y parte de su estructura tuvo que ser remodelada por un incendio.
Por último, Jijona, al ser un pueblo del interior de la provincia de Alicante, ofrece varias rutas de senderismo, ya que está rodeado por montañas. La ruta de la cima del Migjorn y la de Cabeçó d'Or son algunas de ellas.
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