Las tornas han cambiado. Lo que antes era malo ahora es positivo y las hemerotecas arden desempolvando algunas de las declaraciones que, tras el referéndum del 1-O en Cataluña en 2017 y la posterior declaración de independencia del expresident Carles Puigdemont, hicieron algunos de los dirigentes políticos españoles. Muchos de ellos del PSOE.
Este es el caso de Óscar Puente, el diputado y secretario general del PSOE de Valladolid. Antes de su comentada participación en la investidura fallida de Alberto Núñez Feijóo, el socialista criticaba el independentismo catalán y sus decisiones. Concretamente, en una entrevista concedida a Cadena SER en 2018, Puente comparaba la figura del expresident con la del asesino Charles Manson, fallecido en 2017.
"Uno ve ciertos componentes de comportamientos de secta en una parte del independentismo porque da la sensación de que este hombre es una especie de Charles Manson y les tiene a todos metidos en una habitación", decía sin cortapisas. "Da la sensación que van a un suicidio colectivo, pero lo malo es que están arrastrando con ellos al pueblo catalán y en parte también al pueblo español, que están relegando los problemas reales del país a todas estas historias que no van a ningún sitio", añadía.
El discurso de Puente ha cambiado. A finales del mes de septiembre alababa una posible ley de amnistía que permitiera volver a la política "a los que se han situado al margen de la legalidad". El socialista, durante una entrevista en RTVE, se mostraba positivo ante la posible ley, desde este mismo lunes un hecho tras ser entregada en el Congreso de los Diputados.
"Una medida que contribuya a distender en Cataluña la tensión, solucionar un problema que es estrictamente político y dar una salida a aquellos que se han situado al margen de la legalidad para que vuelvan, para que retornen a hacer política, creo que es positiva y es algo que se debe valorar", expresaba.
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